Los transportistas mantienen su convocatoria de paro para los días 20, 21 y 22 de diciembre en señal de protesta contra el “estado de abandono” por parte del Ejecutivo, tal y como ha anunciado el Comité Nacional del Transportes por Carretera (CNTC).
El secretario general de la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística (FVET), Carlos García, ha tildado de “fracaso” la negociación con el Ministerio de Transportes en Noticias 8 Mediterráneo, asegurando que “íbamos con expectativas, creyendo que seríamos capaces de avanzar”, sin embargo, no ha sido así y afirma que “la propuesta es insustancial”, entre otras cosas porque “recoge cosas que el Comité Nacional no quiere asumir como los incrementos de carga para los camiones o los peajes”. El propio trato a los conductores en las zonas de carga y descarga y la ausencia de zonas donde poder estacionar los vehículos tienen mucho que ver con esta movilización. “El tema de la carga y descarga por parte de los conductores nos parece inasumible, no se puede someter a un profesional después de su recorrido y su trabajo en camión, que tenga que esperar largas horas para el momento de llegar a carga y descarga incluso realizarlas materialmente”, explica García.
El secretario general también recalca que los asuntos que reivindican, la normativa ya la contempla. Además, ha querido aclarar que la huelga se fijó en vísperas de Navidad porque había un largo mes y medio por delante con el objetivo de que "hubiera margen y recorrido suficiente para negociar y buscar alternativas”, y en el caso de que eso no ocurriese, “la capacidad de previsión por parte de los comercios permitirían con cierto margen la suficiente mercancía para que llegados al punto de materializar la medida, por sus efectos reales, no fueran tan complejos para la ciudadanía”.
No obstante, el problema se agravaría si llegadas esas fechas las cosas no han tenido solución, ya que “podemos estar abocados a una intensificación del conflicto”, comenta García.
