El Gobierno local no sabe aún cuándo podrá elevar a Pleno los presupuestos de 2022 a pesar de que ya estamos a punto de entrar en el mes de febrero y de que el Ayuntamiento funciona con un documento que ya debió ser prorrogado en 2021.
La teniente de alcaldesa de Economía y Hacienda, Laura Álvarez, admitió este jueves que los técnicos municipales tratan de “redirigir” el borrador que se había elaborado meses atrás para ajustarlo el varapalo que para las arcas municipales suponen los ajustes introducidos en las plusvalías.
Para hacerse una idea del quebranto económico originado por la sentencia del Tribunal Constitucional basta subrayar que cuando los técnicos municipales preparaban el proyecto de presupuestos de 2022 habían estimado unos ingresos por plusvalías de catorce millones de euros.
Sin embargo, la necesaria aplicación del real decreto ley que adapta el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana a la doctrina del Constitucional implica una sustancial rebaja de esas expectativas.
Tanto que el Ayuntamiento estima que no podrá recaudar más de seis millones de euros por este concepto.
Por tanto, la Administración local rebaja sus expectativas de recaudación en ocho millones de euros, según explicó Laura Álvarez en el transcurso del Pleno municipal respondiendo a una interpelación formulada por el grupo popular.
“El borrador que teníamos ya muy avanzado chocó con la realidad, por eso ahora estamos redirigiendo esa situación pero con la diferencia de que antes se estimaban unos ingresos de catorce millones de euros y ahora de apenas seis”, admitió la teniente de alcaldesa.
Laura Álvarez insistió por tanto en la necesidad de ajustar a la realidad ese borrador, si bien no adelantó cuándo podrá finalizar ese trabajo de cara a dotar al Ayuntamiento de un presupuesto adaptado a las circunstancias actuales.
No hay que olvidar a este respecto que el Consistorio mantiene a día de hoy vigente un documento elaborado antes de que estallara la crisis sanitaria, algo que estas últimas semanas le han reprochado todos los grupos de la oposición.
Los suelos de Parque Jacaranda
El Pleno se mostró de nuevo contrario a mantener el cierre de la urbanización Parque Jacaranda después de que la comunidad de propietarios interpusiera un recurso contra el acuerdo definitivo de desahucio administrativo de dos parcelas.
La propuesta salió adelante con el voto en contra del PP, que entiende que se podría alcanzar algún tipo de acuerdo con esta comunidad que le permitiera cerrar la urbanización por las noches.
En este sentido, la teniente de alcaldesa Laura Álvarez fue clara al advertir de que “estos vecinos están ocupando un espacio que pertenece a toda la ciudadanía” y por tanto “no cabe negociación”.
El PP se queda con ocho concejales
Francisco Javier Zuasti se incorporó a la Corporación municipal como nuevo concejal, relevando a Antonio Montero.
Zuasti ha decidido no integrarse en el grupo popular, formación por la que concurrió a las elecciones municipales, sino que trabajará como concejal no adscrito, con lo que el PP pasa de nueve a ocho ediles.
Ningún asunto de gestión municipal
El orden del día de la sesión plenaria no incluyó ningún asunto de gestión municipal más allá que el de Parque Jacaranda, limitándose a abordar proposiciones de los diferentes grupos políticos que en la mayor parte de los casos escapaban a las competencias del propio Ayuntamiento.
Alberto Garzón, el gran ‘protagonista’
Entre esos asuntos que van más allá de la política municipal sobresalieron varias proposiciones al respecto de las declaraciones realizadas por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre la ganadería intensiva y las macrogranjas.
