La polémica por la provisión de test de antígenos a Gibraltar por la farmacia linense Francisco Navarro, utilizando a la constructora Basewell Ltd. como intermediaria, sigue vigente. En otro comunicado, contestando a Together Gibraltar, que criticó en estos días que el Peñçon pague 5,40 libras por test cuando el usuario español abona 2,90 euros, el servicio de comunicación del Gobierno de Gibraltar entra en cierta contradicción con su propia nota de días atrás.
Donde antes atribuía a Basewell Ltd. cualidades de excelente conseguidor de tests desde el inicio de la pandemia, ahora se los adjudica a la farmacia. “Francisco Navarro siempre han sido confiables en su suministro de LFTs (test de antígenos) a la GHA (Autoridad Sanitaria de Gibraltar), dentro de los plazos y al mejor precio, incluso ante la escasez mundial, por lo que el acuerdo permaneció en su lugar”, decían ayer. Días atrás, justificaba el la intermediación de Basewell, con quien, según Together Gibraltar, mantiene el Gobierno una “fructífera y prolongada relación” por importar estas pruebas gratuitamente a la GHA, como lo han estado haciendo desde el comienzo de la pandemia cuando las pruebas y el PPE (Equipos de Protección Individual) eran imposibles de obtener de otras fuentes y el director de Basewell pudo obtener estas pruebas cuando otros no pudieron hacerlo”. Ahora, se desmarcan de Basewell asegurando que, ante la mayor demanda,
“Navarro contrató a Basewell como agente de importación sin cambiar su acuerdo con la GHA”, considerando “el acuerdo comercial” como “un asunto privado entre las dos empresas”, y “de cuyos detalles, el Gobierno no es y no debe ser consciente”. VIVA trató ayer de contactar con la farmacia y el Colegio de Farmacéuticos de Cádiz para conocer su valoración, sin éxito.
