El líder de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado que espera tener una "relación cordial" con el candidato a la Presidencia del PP, Alberto Núñez Feijóo, y "llegar a acuerdos" con él para "echar" al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Así lo ha afirmado Abascal en una entrevista con El Independiente, en la que ha aseverado que continúa "con la mano tendida" al PP, como ya la tenía al actual líder, Pablo Casado.
"Yo espero poder tener un diálogo con Alberto Nuñez Feijóo y espero poder llegar a acuerdos en aquellas cosas en las que seamos coincidentes", ha manifestado, para señalar que no quiere que este "acepte los principios de Vox" ni espera que pretenda que el partido acepte los suyos, pero sí poder "hallar un punto de encuentro para echar a Pedro Sánchez".
Para Abascal, Feijóo puede "sacar de la abstención a votantes muy convencidos del programa del PP", pero, ha avisado, "no a los votantes que están convencidos del programa de Vox", por lo que no está "preocupado" por la llegada del también presidente de la Xunta de Galicia a la Presidencia de los 'populares'.
Por otro lado, ha destacado que ahora mismo Vox está "por delante del PP", según sus encuestas, y su votante está "convencido", por lo que, ha subrayado, no le pasará como a Ciudadanos, que "creció muy rápido y se desplomó".
En este sentido, ha asegurado que a su partido le vota "mucha gente que había votado antes a la izquierda" y que hoy ven que esta "no les defiende porque están entregados a la transición energética, y todas las políticas que proponen les llevan a ellos a la ruina y a la miseria".
"Son muchas más las personas que les votaban a ellos y ahora nos votan a nosotros de las que ellos se pueden imaginar. Y yo no tengo ninguna duda de que eso va a ir a más", ha apostillado Abascal, para criticar al CIS por sus encuestas.
Por otro lado, se ha referido al reciente pacto del PP con Vox en el Gobierno de Castilla y León. Al respecto, ha indicado que las consejerías que corresponderán a su partido aún no están definidas porque no se ha querido tomar "una decisión precipitada" debido a que el acuerdo ha sido in extremis. Igualmente, ha celebrado que "el sentido común y el veredicto electoral se ha impuesto" con este pacto.
"Este es un acuerdo justo tanto en el reparto de poder como en las orientaciones generales del pacto de gobierno que puede satisfacer a los votantes de ambos partidos", ha resaltado, para manifestar su "satisfacción" porque no van a "existir" en la región "leyes discriminatorias" como la de violencia de género.
Asimismo, ha afeado las críticas de la izquierda al pacto y le ha recordado al Gobierno que "no puede dar ninguna lección", así como ha arremetido contra el PSOE por ser un partido "entregado al extremismo golpista y de izquierdas".
También, ha calificado de "intolerable" que el presidente del Partido Popular europeo, Donald Tusk, que ha rechazo el pacto, se "entrometa". "No entiendo que el señor Tusk cometa la imprudencia de decir a sus propios socios con quién tienen que pactar en España", ha lamentado.
Por último, ha dicho que Vox "en el ejercicio del gobierno va a mostrar lo que es: un partido cabal, que actúa en función de su representación y que representa los intereses de sus electores sin hacer daño a nadie y sin perseguir a nadie".
"Allí no nos vamos a comportar como si tuviéramos un poder mayor del que tenemos. Queremos formar parte del gobierno lealmente, no intentando traicionar al presidente del gobierno regional a la primera de cambio, como le ha pasado al señor (Alfonso Fernández) Mañueco y como le pasó a la señora (Isabel Díaz) Ayuso con Ciudadanos. Nosotros, si nos comprometemos con un gobierno, nos comprometemos", ha agregado.