Los ocupantes del asentamiento chabolista de El Walili en Níjar (Almería) han anunciado protestas y cortes de carretera desde la tarde de este martes en protesta por el desmantelamiento de este núcleo en que se sitúan unas 500 personas que, aseguran, carecen de una "alternativa habitacional", por lo que se ven abocados a "crear otros poblados".
En concreto, según han indicado los trabajadores afincados en el asentamiento y el sindicato SOC-SAT en un comunicado, se van a producir cortes de carretera en las inmediaciones del poblado, en concreto, en la intersección AL-3108 y 3112 a partir de las 17,00 horas este martes así como los días 28 y 29 de diciembre.
Los trabajadores protestan ante el proceso administrativo iniciado por el Ayuntamiento de Níjar (Almería) para derribar el poblado en el que malviven sus moradores, ya que "trabajan en un territorio aislado, limítrofe con el Parque Natural del Cabo de Gata y sin transporte público".
Los afectados han apuntado que el desalojo podría producirse en el mes de enero, si bien "durante este otoño también han sido desalojados pequeños asentamientos". En esta línea, han afeado los acuerdos de la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez (PSOE), con la patronal agraria y turística para "eliminar dicho poblado" porque "crea mala imagen exterior de los productos de las empresas hortofrutícolas y del turismo", han dicho.
Los residentes de El Walili junto al Sindicato de Obreros del Campo-SAT ya realizaron una marcha de protesta el pasado 25 de noviembre hasta el Ayuntamiento de Níjar al respecto, si bien "tienen previstas nuevas acciones" para reivindicar que no se les desaloje "mientras no se contemple una alternativa habitacional" y se les facilite acceso a "servicios básicos de comunidad como agua potable, luz, recogida de basuras y saneamientos".
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) también pidió la pasada semana al Ayuntamiento de Níjar que paralizara el desalojo y derribo ya ordenado administrativamente del asentamiento chabolista de El Walili, también conocido como Los Nietos, mientras no se garantice una alternativa habitacional permanente para los 500 vecinos del municipio que allí residen.
La organización aseguró en un comunicado que, en estos momentos, el Ayuntamiento está construyendo "unas cajoneras con 62 habitáculos, que estarán terminadas posiblemente para junio, y que servirán para alojar provisionalmente, previo pago por nómina y limitado a dos meses, a trabajadores temporales", lo que obvia que las personas migrantes que trabajan en la agricultura de esta zona "residen de manera permanente ya que la actividad agrícola es continuada durante todo el año, y que una parte importante no puede cumplir con los requisitos establecidos por el consistorio".
Apdha remarca que es necesaria la paralización del procedimiento hasta no tener una alternativa de alojamiento permanente y vital que se "les facilite acceso a los recursos básicos de la comunidad", así como que se desarrolle en el municipio "una política de vivienda asequible para las personas que trabajan en la agricultura".