En esta ocasión, son 15 los Ayuntamientos incluidos en el programa, que se suman a los 9 que participaron en la primera fase, llevada a cabo en verano. La iniciativa ha supuesto una inversión de 187.913 euros, financiados a partes iguales por la Diputación Provincial y la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, a través de la Agencia Andaluza de la Energía, de la Junta de Andalucía.
Se trata de una actuación enmarcada dentro de los Planes Energéticos Municipales (PEM), consistente en diagnósticos energéticos pormenorizados de los municipios, así como de sus centros e instalaciones, para detectar las principales fuentes de consumo eléctrico y las posibilidades de aplicación de medidas correctoras, de inclusión de energías renovables y de mejora de la eficiencia. Las auditorías han permitido conocer el estado energético actual.
El conjunto de municipios auditados en esta segunda fase de los POAP presenta un consumo de Energía Primaria de 3.247 toneladas equivalentes de petróleo al año, correspondientes a un consumo eléctrico de 12.892.959 MWh al año, y un consumo térmico de 80.125 tep al año, lo que supone un coste económico para este grupo de municipios de 1.845.353 euros anuales.
El plan de actuaciones propone un conjunto importante de medidas para el alumbrado público, como la optimización de la factura eléctrica, la sustitución de más de 8.000 lámparas por otras de mayor eficiencia; la instalación de balastos de doble nivel, estabilizadores y reductores, o el uso de sistemas LEDs para semáforos. En el caso de edificios, las medidas también pasan por sustituir luminarias, optimizar las facturas de suministro eléctrico, instalar energías renovables o mejorar el aislamiento.
Inversión
La aplicación de éstas y otras medidas implicarían una inversión total de 3.327.716 euros, que se amortizarían en algo menos de cuatro años.
Con ello, los Ayuntamientos pueden conseguir un ahorro energético del 42% respecto al consumo actual y un ahorro económico del 46.68%, lo que equivaldría a 861.331 euros al año. En cuanto a los beneficios para el Medio Ambiente, cada año se dejarían de emitir a la atmósfera 6.799,75 toneladas de CO2.
Este acto sirvió también de marco para la firma del pacto provincial por la energía sostenible, un documento de compromiso efectivo por parte de los Ayuntamientos para el fomento de una política provincial coordinada de ahorro, eficiencia energética y el impulso de las energías renovables.