Miembros de la Comisión de Seguridad de Transporte Aéreo se traslada a esta hora desde Washington al lugar de los hechos para abrir una investigación que permita determinar las causas del accidente. Todo indica que una bandada de gansos se cruzó con el avión minutos después de despegar del aeropuerto de La Guardia y provocó averías en dos de los motores del aparato.
Bloomberg aseguró que el piloto hizo un trabajo "excelente" al realizar una complicada maniobra de emergencia para aterrizar sobre las aguas del río Hudson, y que afortunadamente no hubo que lamentar víctimas mortales. "En el avión había 155 personas y todos están a salvo", indicó el alcalde, quien precisó que los heridos que fueron trasladados a los hospitales no revisten gravedad.
"Todos los pasajeros salieron a salvo del agua, y afortunado no hay heridos de gravedad. Algunos han sido trasladados a hospitales de Nueva Jersey y otros a Nueva York", añadió el alcalde, quien ante las preguntas de los periodistas insistió en que todo ha sido como resultado de un accidente. "No hay ninguna evidencia de que se haya tratado de un atentado terrorista", sentenció.
Por su parte, el gobernador del estado de Nueva York, David Patterson, afirmó durante una improvisada rueda de prensa que estaba muy contento porque en esta ocasión no ha habido que lamentar víctimas mortales, tras recordar lo ocurrido en la ciudad durante los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.