El presidente interino de Túnez, Moncef Marzuki, ha señalado que el asesinato del dirigente opositor Choukri Belaid "es parte de un complot lanzado contra Túnez para amenazar su seguridad y su estabilidad y sumir al país en problemas".
En declaraciones a la prensa a su llegada al aeropuerto de Túnez desde Estrasburgo, Marzuki ha subrayado que "los últimos ataques contra mausoleos forman también parte de este complot, con el que las personas implicadas pretenden sembrar la duda en los tunecinos".
En este sentido, ha recalcado su confianza en las fuerzas de seguridad y en su capacidad para detener a los responsables, al tiempo que ha solicitado a la clase política que dé muestras de paciencia e inteligencia para salir de esta situación, según ha informado la agencia estatal tunecina de noticias, TAP.
La muerte del líder opositor ha provocado una serie de manifestaciones en la capital tunecina, Túnez, y en la localidad de Sidi Bouzid, la cuna de la primera revolución de la Primavera Árabe que puso fin al régimen liderado por Zine el Abidine Ben Alí el 14 de enero de 2011.
Algunas de las protestas han derivado en disturbios y se han saldado con decenas de heridos y un agente de la Policía tunecina, identificado como Lofti Zar, muerto a consecuencia de las heridas sufridas por las pedradas de manifestantes. El agente estaba desplegado para controlar a los manifestantes que protestaban ante la sede del Ministerio de Interior.
Pese a los incidentes, el ministro de Interior, Alí Laarayedh, ha indicado que, "por el momento no se decretado el toque de queda". El ministro ha resaltado que el objetivo de las fuerzas de seguridad es "dilucidar" el crimen y "arrestar" a los responsables.
Por su parte, los partidos opositores han convocado una huelga general en protesta por el asesinato de Belaid, quien se había mostrado muy crítico con el Gobierno de la formación islamista Ennahda. El partido islamista ya ha rechazado cualquier implicación en el suceso.
NUEVO GOBIERNO
Horas antes, el primer ministro tunecino, Hamadi Jebali, había anunciado que disolverá el Gobierno y formará un ejecutivo de tecnócratas.
"Tras el fracaso de las negociaciones con los partidos para una remodelación del gobierno, he decidido formar un gobierno tecnócrata reducido", afirmó Jebali. El primer ministro explicó que no habrá elecciones para nombrar al nuevo Gobierno pero prometió que los comicios se celebrarán tan pronto como sea posible.
El jefe del Gobierno tunecino realizó este anuncio en un discurso televisado en el que condenó el asesinato de Belaid.