A ciegas se va a llamar en España la nueva película de Meirelles, un título que no le ha gustado nada a Saramago.
“Hacer las cosas a ciegas, es hacerlas sin saber lo que quieres hacer realmente y no es lo que ocurre en esta historia, en donde todos los personajes son ciegos de verdad”, explicó el escritor portugués durante la presentación de la película.
Meirelles, que abrió la pasada edición del Festival de Cannes con este largometraje, aprovecha en la cinta el hecho de que la humanidad esté paralizada por una misteriosa epidemia de ceguera, para explorar lo bueno y lo malo de la naturaleza humana.
La película, que se estrenará el día 13 de marzo, arranca cuando un hombre que va en su coche se queda ciego de pronto y todos aquellos con los que se va encontrando padecen la misma desgracia y así, poco a poco, el pánico se adueña de la ciudad por culpa de La enfermedad blanca, que cierra los hospitales repletos de enfermos en cuarentena.
Julianne Moore, convertida en los ojos del filme, es una mujer que finge estar enferma para estar cerca de su marido Mark Ruffalo y que, harta de ver cómo transcurre el día a día en los centros en los que son confinados los enfermos, decide plantar cara a la cruda realidad.
Completan el reparto Danny Glover, que es el hombre del parche negro, el narrador de la historia; Gael García Bernal, el camarero convertido en rey de la corrupción; Alice Braga, la misteriosa chica de las gafas oscuras; Yusuke Iseya y Yoshino Kimura, el primer paciente ciego e impulsor de la historia, y su mujer; y Don McKellar, el buen samaritano convertido en ladrón.
Aunque no se haya mostrado satisfecho con el título, Saramago ha asegurado que la película es “una adaptación casi perfecta, porque no hay nada perfecto, de la novela” y ha comentado que echa en falta “el personaje del escritor ciego que cuenta lo que va pasando o la visita a la casa de la familia de la chica de las gafas negras”.
Lo cierto es que Meirelles siempre ha perseguido esta historia de Saramago para llevarla a la gran pantalla. “Leí el libro en el 97, antes de hacer Ciudad de Dios y ahora he visto como por fin se cumplía un sueño”, ha aclarado el cineasta brasileño.