“No creo que la crisis vaya a empeorar la situación, aunque tampoco se pueden subestimar sus consecuencias”, dijo el comisario durante la presentación de una campaña a escala comunitaria para ayudar a luchar contra la diferencia de retribución por razón de sexo.
Por países, las mayores diferencias se dan en Estonia (30%) y Austria (25%), y las menores en Italia (4%) y Malta (5%), mientras que España se sitúa en la media, con un 17,6%.
Sin embargo, las consecuencias que tendrá para las desigualdades laborales la caída de la economía no están todavía claras, según Spidla, que remarcó que desde que comenzó la crisis han perdido su empleo el triple de hombres que de mujeres.
El comisario citó estudios según los cuales las instituciones financieras con mujeres en su equipo directivo están soportando mejor las turbulencias, mientras que las pequeñas y medianas empresas dirigidas sólo por hombres están siendo un 10% menos eficaces.
En este sentido, “además de argumentos morales, hay argumentos económicos poderosos” para defender que “sólo recogiendo el potencial de todos nuestros talentos podremos enfrentarnos a la crisis”, según Spidla.