La Policía Local de Mijas (Málaga) detuvo el pasado viernes 7 de marzo a tres hombres acusados de robar tres maceteros artesanales, cuyo valor rondaba los 2.000 euros, de una vivienda de la urbanización Mijas Golf.
Los tres detenidos tenían numerosos antecedentes policiales y, ahora, han sido imputados por un presunto delito de robo con fuerza en las cosas, según han informado desde el Consistorio mijeño en un comunicado.
Los hechos ocurrieron sobre las 17.40 horas, cuando la Jefatura de la Policía Local recibió una llamada de una vecina de Mijas Golf alertando de la presencia de tres hombres, con actitud sospechosa, sacando objetos de una vivienda cercana en obras y que se disponían a huir en una furgoneta de color naranja.
Hasta allí se desplazó una unidad de agentes que pudo comprobar cómo, efectivamente, la puerta del referido domicilio estaba forzada y no había nadie en su interior. A la vez, otra unidad observó, mientras circulaba en el camino de Campanales, un vehículo que respondía a las características descritas por la vecina, por lo que le dieron el alto y ordenaron a sus tres ocupantes bajarse.
Tras realizar una inspección ocular, los funcionarios pudieron ver en la parte trasera de la furgoneta hasta cinco maceteros de cerámica --tres de ellos de grandes dimensiones-- y una bandeja, también del mismo material. Los tres ocupantes manifestaron que habían encontrado estos objetos en la calle.
Sin embargo, los agentes pudieron comprobar, han precisado, que sobre los tres pesaban varios antecedentes policiales, por otras acciones que cometieron en el pasado, y que, al mismo tiempo, los policías que visitaron la casa de Mijas Golf, donde presuntamente habrían sustraído los maceteros, aseguraron que había más útiles de jardinería de similares características a los que había en el coche.
Por todo esto, los agentes detuvieron a los tres jóvenes para ponerlos a disposición de la Guardia Civil, imputados por la comisión de un posible delito de robo con fuerza en las cosas.
Por su parte, el propietario de los maceteros confirmó que la cerradura de su vivienda había sido forzada y que el valor de estos objetos ronda los 2.000 euros. Según manifestó, los compró en China, hace unos años y tenían para él un gran valor sentimental.