¿Qué tiene que pasar?

Qué tiene que pasar en esta provincia y en esta ciudad para que alguien ponga freno al drama del paro? ¿Cuántos SOS debe mandar la sociedad para que las inversiones resuciten a una tierra enterrada en desesperación conformista? ¿Cuántas rogativas al cielo pidiendo un agua que de comida tres meses al año a miles de familias de jienenses que siguen dependiendo del olivar? ¿Cuánto paro más soportaremos? Ayer Jaén volvió a liderar la subida del paro en España y ya no se puede achacar a la campaña de aceituna, que hace tiempo que concluyó. Nuevamente, sindicatos, empresarios y políticos volvieron a lamentar las cifras y a pedir una discriminación positiva para una provincia que ya está preparando las meletas para irse a la costa, y no precisamente de vacaciones, sino a buscar un empleo en la hostelería o en lo que sea. Tal vez no haya que gritar más alto y simplemente sea necesario reivindicar el lugar que queremos para nuestra tierra, para nuestras familias, para nuestros hijos. En otras provincias como Teruel o Soria hace años que surgieron plataformas ciudadanas que reivindicaban su lugar e inversiones que propiciaran su desarrollo. Aquí ni eso. Cada uno de nosotros puede hacer algo para cambiar las cosas o simplemente para que quienes tienen las herramientas lo hagan, pero para ello habrá que comprar el cupón al menos. En Jaén no hay trabajo ni nadie lo propicia y un mes más volvemos a ser los primeros en destrucción de empleo.