El Gobierno de Mariano Rajoy no obligará a los policías a participar en actos oficiales del Cuerpo que sean de corte religioso por ser "contrario" a los derechos fundamentales de la libertad ideológica, religiosa y de culto reconocidos en la Constitución y, por tanto, tampoco les sancionará.
Ésta es la respuesta que da al portavoz de Interior del PSOE en el Congreso, Antonio Trevín, quien denunciaba que, pese a que ninguna confesión tiene carácter estatal, el Ministerio que dirige Jorge Fernández Díaz trate de "imponer" creencias religiosas con la concesión, por ejemplo, de distintas medallas de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad a vírgenes, obispos y arzobispos.
"Si esto ya es reprobable --escribía Trevín--, ahora proponen cambios en actos formales del Cuerpo Nacional de Policía con evidentes connotaciones religiosas y que suponen la apariencia de militarización en unas ceremonias que, no lo olvidemos, son las de un cuerpo civil y laico".
"NUNCA" SERÁ ESO MOTIVO DE SANCIÓN
Sin embargo, en su contestación, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Gobierno recalca que "no tiene intención" de introducir "ningún cambio" en los actos oficiales de la Policía, y garantiza, además, que "nunca" va a obligar a ningún funcionario a realizar actuaciones "contrarias" a la Constitución.
Asimismo, deja claro al diputado socialista que "en ningún caso" la negativa a la realización de actos "contrarios" a los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución "puede ser motivo de sanción".