El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Málaga, en el marco de un dispositivo establecido contra la pesca furtiva y de inmaduros, se ha incautado de 126 kilos de chanquetes y ha imputado a dos hombres y una mujer dedicados, presuntamente, a su comercialización.
El operativo se inició el pasado mes de mayo permitiendo en una primera fase determinar qué personas se dedicaban a la compraventa habitual de especies prohibidas con el fin de comercializarlas en establecimientos de restauración y venta ambulante, según ha informado en un comunicado el instituto armado.
Los agentes establecieron un dispositivo en el que sorprendieron a estas personas descargando de un vehículo numerosos envases con chanquetes, los cuales se encontraban almacenados en un local clandestino ubicado en la localidad malagueña de Torremolinos, donde, posteriormente, eran preparados para su comercialización.
En el momento de ser sorprendidos se localizaron en el interior del vehículo 11 envases con un total de 66 kilogramos de chanquetes. Tras realizar el registro del local, se encontraron otros 10 con otros 60 kilos, haciendo un total de 126 kilogramos.
Como consecuencia del operativo se procedió a la imputación de estas tres personas como presuntas autoras de un delito contra la fauna. Asimismo, los agentes intervinieron de forma cautelar el vehículo utilizado para el transporte y decomisaron 500 euros como parte del pago a cuenta de los chanquetes adquiridos.
Los guardias civiles encargados de esta intervención han instruido diligencias e interpuesto las correspondientes denuncias por infracciones a la normativa que regula la pesca marítima.