La Entrega no oculta ya su deseo de integrarse en la Carrera Oficial

La Hermandad de la Entrega de Guadalcacín empieza a tener claro que su futuro pasa por integrarse en la Semana Santa de Jerez “como una cofradía más” a pesar de la distancia que separa a su sede del centro histórico. El hermano mayor, Sergio Morales, admitió ayer en el programa Luz de Pasión, que se emite semanalmente en Ondaluz Jerez, que el deseo de traer a la cofradía a Jerez está “cada vez más presente” en el ánimo de la corporación. 
“Guadalcacín nos ha visto crecer y nos alienta día a día a seguir trabajando y creciendo, pero está llegando el momento en que la hermandad debe salir, porque en cierta medida nos estamos cansando de dar vueltas por el pueblo”, explicó.
Partiendo de la base de que la hermandad “quiere algo más” que “dar vueltas a una plaza y a otra”, es evidente que “los tiempos” no dependen ya de la cofradía, sino de lo que vaya dictando en cada momento el Obispado de Asidonia-Jerez.
De ahí que la cuestión no se esté planteando todavía de una manera formal, como prueba el hecho de que Morales admite que la hermandad no ha elaborado todavía ningún estudio que cuantifique cuánto tiempo sería necesario para culminar el que sin duda sería mayor itinerario de la Semana Santa de Jerez. “Podrían ser catorce o quince horas, pero es algo que ahora mismo no nos importa. Lo que sí está claro es que a nosotros nos gustaría, no sé cuándo, traer Guadalcacín a Jerez, a la Carrera Oficial y a la Catedral”, añadió.
A este objetivo va a contribuir el hecho de que “todo está creciendo” y si bien antes se apreciaba una distancia considerable entre Jerez y Guadalcacín, “ahora ya todo parece más cercano”. “Eso nos va a ayudar mucho -apostilló- a lograr que la cofradía sea una más de Jerez y no se estanque” en la pedanía.
Este deseo no significa que la Hermandad de la Entrega no se encuentre plenamente identificada con Guadalcacín, toda vez que se entiende que el hecho de que algún día se alcance el objetivo propuesto puede contribuir precisamente a afianzar sus vínculos con los vecinos de la pedanía, donde desarrolla una notable labor.