Un grupo de ciudadanos de Rota han acudido en la mañana de hoy al Castillo de Luna para hablar con la alcaldesa de Rota y exponerle su preocupación acerca del caso de una pareja de personas en riesgo de exclusión social y que actualmente se ven obligados a vivir bajo el tobogán de un parque situado en la zona del Rompidillo.
Según han informado a los medios estos vecinos preocupados, se trata de las víctimas de un desahucio por impago de alquiler, que a pesar de ser los primeros en la lista de demandantes de viviendas sociales, no han podido beneficiarse de ella porque otra familia con varios hijos ha okupado la vivienda a la que ellos tenían derecho por su situación. Llevan alrededor de tres semanas en esta situación, resguardándose de las bajas temperaturas gracias a ropas de abrigo, mantas y sacos de dormir que les han proporcionado algunos vecinos como ayuda, y alimentándose a base de comidas elaboradas que los mismos vecinos les proporcionan.
Este grupo de vecinos afirma que desde el Ayuntamiento, y a través de su delegación de Servicios Sociales, se les ha ofrecido a estas personas pagarles tres días de alojamiento en una pensión o un albergue de Jerez de la Frontera, y ayudarles con el pago de la mitad del alquiler de una casa, siempre y cuando ellos encuentren una vivienda de alquiler en la que se puedan quedar. El problema, según explicaban esta mañana, es que nadie quiere alquilar una casa a estas personas, que ni siquiera tienen una nómina o papeles que les permitan acceder a un alquiler. Además, han mostrado su preocupación porque la Policía Local y Nacional haya tenido que intervenir para proteger a estas personas, ya que se les han tirado piedras y petardos, llegando a arder los plásticos con los que protegen el hueco del tobogán bajo el que duermen.
El colectivo ha explicado que "hay un problema de vivienda en Rota, y no se puede mirar para otro lado. Esta pareja llama más la atención por su situación, pero no son los únicos. Sabemos que hay gente viviendo en coches, que otra pareja está viviendo en una casa derruida en Punta Candor, y otros ocupan los morabitos de la Forestal. No podemos tolerar que haya gente en esas condiciones", ha señalado.
Han criticado además que en las redes sociales y en el pueblo "se esté intentando tirar a estas personas por los suelos desvelando datos que conocen a través de personal de Servicios Sociales. Aquí no estamos para juzgar a nadie, y lo único que importa ahora es su situación, nada más. Se está difundiendo información que debería ser privada, y se les acusa de ser pobres. Solo esperamos que la representante de los ciudadanos nos reciba porque es la alcaldesa de todos".
El colectivo ha señalado que en el caso de que la alcaldesa o alguien no les reciba para tratar este asunto, estudiarían otras formas de llamar la atención sobre este caso concreto y los demás, porque "hay que dejar de mirar para otro lado", han dicho.