Al menos 18 personas murieron anoche en el centro y el norte de Siria por el impacto de cohetes lanzados por los rebeldes y en bombardeos de aviones gubernamentales, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Al menos siete personas, de ellas seis de la misma familia, fallecieron en un ataque aéreo de la aviación castrense en el pueblo de Um Hartin, en el este de la provincia central de Hama.
Otras cuatro personas perdieron la vida y varias fueron heridas en un ataque similar en la localidad de Kurin, en la provincia septentrional de Idleb.
Mientras en Alepo, también en el norte, al menos tres personas perecieron por la caída de cohetes lanzados por los insurgentes en lugares próximos a la zona de Shijan, bajo el control del régimen y en la capital homónima de la provincia.
Otras cuatro personas murieron por un bombardeo de aviones militares en el área de Al Auina al Kabira, en la periferia sureña de la ciudad de Alepo.
Siria es escenario de un conflicto desde hace cuatro años que ha causado unos 220.000 muertos, según la ONU.