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Mireia Belmonte se muestra prudente, aunque irá "a por todo" en Río 2016

En un encuentro sobre el deporte español en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, junto a su entrenador, Fred Vergnoux, Mireia Belmonte ha explicado que en pruebas de ese nivel "no se puede controlar" la aparición de nuevas nadadoras, algunas de ellas muy jóvenes

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  • Belmonte. -

La nadadora española Mireia Belmonte se ha mostrado hoy prudente sobre los resultados que pueda obtener en los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, aunque ha asegurado que su objetivo es "ir a por todo".

En un encuentro sobre el deporte español en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, junto a su entrenador, Fred Vergnoux, Mireia Belmonte ha explicado que en pruebas de ese nivel "no se puede controlar" la aparición de nuevas nadadoras, algunas de ellas muy jóvenes.

Por ello, ha puntualizado que primero tiene que hacer este verano un buen mundial para saber dónde se encuentra en el ránking y después lograr las mínimas para los Juegos Olímpicos, aunque ha apuntado que su objetivo es "ir a por todo" en Río de Janeiro.

En este sentido, Vergnoux ha advertido que un nadador que logra medalla en un mundial "tiene un 87 por ciento" de posibilidades de repetir éxito en unos Juegos Olímpicos.

Además, a preguntas de los asistentes, ha explicado que, aunque España posee unas grandes instalaciones de entrenamiento, solo tiene una Mireia Belmonte porque solo ella está dispuesta a mantener el nivel de exigencia que él tiene y que no va a reducir. "Para mí el plan lo es todo", ha apostillado.

De hecho, Fred Vergnoux ha asegurado que ha tenido una nadadora que podría haber nadado más rápido que Mireia los 200 metros mariposa, pero se ha marchado de su grupo.

La campeona española también ha destacado la importancia de la preparación mental para alcanzar el éxito y ha señalado que su filosofía es ir "día a día". "Si un día me ha ido bien, lo olvido, y si me ha ido mal, también", ha relatado.

Y ha señalado que una prueba "se puede ganar o perder" ya en la cámara de salida, el espacio donde se reúnen los nadadores antes de salir a la piscina. En esa habitación, ha detallado que su estrategia es "ocupar" el espacio de su rival más directa para "tratar de comerle la moral".

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