El CEIP Pío XII ha decidido coger el toro por los cuernos para lidiar con el problema de las barreras arquitectónicas que acusa el centro y se ha marcado el reto de asumir por cuenta propia la inclusión del alumnado con dificultades motoras para convertirse en un centro de referencia de integración.Para ello, este centro va de la mano de los padres y la AMPA la Solera del CEIP de Pio XII ya ha empezado a movilizarse para conseguir en tiempo récord la solidaridad y colaboración de los establecimientos y comercios de la zona y del centro. Desde la asociación de padres y madres lo tienen claro: no pueden dormirse en los laureles esperando que las administraciones respondan ante la “escasa remodelación” que tanto la Junta como el Ayuntamiento han practicado en los últimos años para adaptar las instalaciones.
Entienden que las obras realizadas hasta ahora “se quedan cortas” para una “plena integración”. Por ello, se han marcado el objetivo de dotar al colegio de las mejoras necesarias con lo que recauden de una jornada benéfica que celebrarán el próximo sábado 28 de noviembre al mediodía con el apoyo de comercios de su entorno.
La propuesta incluirá pases de modelos infantiles, teatro para niños, coro navideño y servicio de bebidas. En concreto, las actuaciones que pretenden costear consisten en el acondicionamiento del suelo y la adaptación de los espacios que existen para evitar el distanciamiento y la diferenciación.
