La prolongada escasez de lluvia que sufre Jaén, al igual que la mayoría del país, comienza a cebarse ya con los pantanos de la cuenca del Guadalquivir. Ayer, el pantano del Quiebrajano, que es el que abastece en gran medida a la capital, se encontraba ya por debajo de la mitad de su capacidad, concretamente al 49’7 por ciento, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
En tan solo doce meses, y después de uno de los años hidrológicos más secos de esta década, el Quiebrajano ha perdido un 25 por ciento de su capacidad, ya que en la misma semana del año pasado se encontraba al 75 por ciento. No obstante, hace una década la situación era similar. A principios de diciembre de 2005 el pantano solo contaba con 45’63 por ciento del total de agua que puede soportar.
De este modo, y según los datos facilitados semanalmente por el Ministerio de Agricultura, el Quibrajano está por debajo de la media de la cuenca del Guadalquivir, que está al 60’1 por ciento.
Lluvia
El año hidrológico se cerró el pasado mes de septiembre con apenas 300 litros de media por metro cuadrado, cuando la media de la última década había sido de unos 475 litros. Sin embargo, la situación, lejos de mejorar, continúa empeorando, ya que desde el 1 de octubre, en la capital apenas se han registrado 69 litros por metro cuadrado, 37’3 de ellos, correspondientes al mes de noviembre y el resto al mes de octubre, porque en diciembre solo se han registrado 0’5 litros.
