El comité de empresa de Limasa no está dispuesto a callarse más. Su presidente, Manuel Belmonte, amenaza con destapar todas las irregularidades que comete la empresa mixta encargada de la gestión de la limpieza en Málaga. Empezando, avanza, por el sistema de recogida de basuras. Este miércoles presentará una denuncia ante la Inspección de Trabajo poniendo sobre la mesa el deterioro y sobrecarga que, asegura, padecen los camiones encargados de la recogida de residuos.
Una decisión desencadenada tras las casi 200 nuevas sanciones leves impuestas al personal fijo. Expedientes que se saldan con de 1 a 2 días de empleo y sueldo, que se pueden convertir en graves por acumulación, y que se suman a los también casi 200 impuestos días atrás por bajo rendimiento o no cumplir con la recogida, según la empresa.
“Ante la actitud de la empresa hemos optado por cumplir con la ley de prevención de riesgos laborales, aquí no hay ninguna huelga encubierta como dice el señor Raúl Jiménez”, alegó el líder sindical, que puso sobre la mesa los riesgos a los que se enfrentan los conductores de los camiones si se exceden del peso límite, entre ellos, riesgo de accidente en caso de frenazo, giro o volcar. “Es una ilegalidad, una práctica habitual desde hace muchos años pero hemos dicho basta”, sentenció Belmonte, que apuntó a que hace una semana ya remitieron al propio inspector esta denuncia que hoy formalizarán.
El objetivo final es que el organismo inicie una investigación al respecto. Precisamente, entre el jueves o el viernes, tendrá lugar finalmente la esperada comisión de investigación, forzada en pleno a propuesta del grupo Ciudadanos, que tratará de arrojar luz en la gestión de la empresa mixta. Una comisión que será pública y paralela a unacomisión de control. Los resultados servirán para aclarar el futuro de Limasa tras el fin de contrato en 2017.
