Al grito de “Sí se puede”, la plantilla de limpieza de Limasa votó en la noche de este lunes en una asamblea en Los Ruices continuar con la huelga indefinida de basura que esta madrugada cumple su primera semana. El presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte, explicó a la salida que los trabajadores “por mayoría” exigen que la empresa y el Ayuntamiento de Málaga den cumplimiento al convenio laboral de 2010-2012 “en su totalidad”, según la sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Málaga que fija éste como único marco vigente, “sin tener en cuenta los recortes posteriores”.
“Los trabajadores han dicho basta, están cansados de que los ninguneen”, apuntó Belmonte, que lamentó que, mientras la basura se acumula en las calles de la ciudad, casi 4.000 toneladas ya, el alcalde les diga que “son unos privilegiados por ganar 1.300 euros netos”.
El principal escollo en la tensa negociación es la paga de productividad, cifrada en 1.431 euros por la plantilla, que en la propuesta municipal rechazada quedaba reducida a 1.143 euros, abonándose 276 euros en la extra de septiembre y el resto, 867 euros, fraccionada en dos partes, una de las que cuales se pagaría prorrateada en once mensualidades.
Otro de los frentes donde el Ayuntamiento se ha encontrado con oposición es en los días de vacaciones. El comité de empresa insistió ayer en contar con 15 días en verano y 21 días en invierno “para así favorecer la contratación de eventuales y domingueros, completar los cuartelillos que tienen descubiertos y mejorar la limpieza en Málaga”, aseguró Belmonte, que apostó por un modelo municipal y acusó a la empresa Limasa de “llevarse 24 millones de euros en beneficios mientras nadie dice nada”.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, que aludía a la “responsabilidad” de la plantilla para poner fin al paro, insistió ayer en que con la oferta se daban “las condiciones adecuadas” para desconvocar, hemos buscado atender en lo posible el planteamiento de los trabajadores”. El Ayuntamiento estimó que la propuesta municipal implicaría un desembolso de algo más de 3 millones de euros para este año y casi cinco para 2017.
Muchos de los asistentes a la asamblea plantearon llevar la lucha laboral a las calles y propusieron empezar movilizaciones para “explicarles a los malagueños la realidad de Limasa”.