Irreales, que repiten proyectos incumplidos año tras año, poco austeros, con inversión muy triste o que no se ajustan a la realidad malagueña. Son algunos de los calificativos que los grupos en la oposición, Partido Socialista, Málaga Ahora y Málaga para la Gente, dedicaron ayer al proyecto de presupuesto que se debatirá en pleno este viernes.
Unas cuentas que alcanzan los 732,6 millones de euros (con una inversión de 62,8 millones) que, a todas luces, y si el equipo de Gobierno popular no atiende alguna de las enmiendas de los grupos, saldrán adelante únicamente con el apoyo de Ciudadanos, cuyas ideas se plasman en casi 16 millones de euros.
El grueso de las críticas se centró, especialmente, en el aumento de partidas como externalizaciones y estudios técnicos externos o el coste del mantenimiento de los nuevos museos. Aunque también en la previsión de ingresos por impuestos, especialmente las plusvalías tras una anunciada bajada fiscal. Tampoco pasaron por alto las retribuciones de directivos o la partida para publicidad.
Propuestas
Entre las enmiendas que llevarán a la sesión, rebajar partidas para sacar adelante proyectos como la recuperación de la antigua prisión de Cruz de Humilladero, el cinturón verde, los mercados municipales de Churriana o Teatinos, la apertura de guarderías municipales o la reapertura de las piscinas de Puerto de la Torre y Campanillas.
os grupos en la oposición coinciden además en reclamar más fondos para un plan de empleo urgente, gasto social, más partida para el área económica, la cultura en los barrios o la recuperación del patrimonio histórico malagueño.
“Son las cuentas que Málaga puede tener ahora mismo”
Nada bien sentaron ayer las críticas al alcalde, Francisco de la Torre, que consideró que la oposición ha simplificado de forma “injusta” las cuentas. Para el regidor, “pueden ver reflejados muchos de sus planteamientos y aspiraciones”. El equipo de gobierno popular que, a todas luces, se quedará sólo con el voto afirmativo de Ciudadanos, no aceptó ayer que el presupuesto sea ni “poco austero” ni con una inversión “triste”.
“Son las cuentas que Málaga puede tener ahora mismo”, defendió el primer edil malagueño que, ante las acusaciones de que el documento ha llegado tarde a los grupos en la oposición, aseguró que “las cuentas son transparentes”. “En estos presupuestos nos seguimos ocupando de asuntos como las viviendas o los ascensores, que corresponden al ámbito de acción de la Junta de Andalucía”, apuntó De la Torre, que también puso sobre la mesa que las cuentas contemplan un ahorro para los malagueños de 10 millones de euros con las ordenanzas fiscales de 2016.