El máximo tribunal norcoreano sentenció a doce años de internamiento en campos de trabajo a las periodistas estadounidenses de origen asiático Euna Lee y Laura Ling, detenidas el 17 de marzo, por hallarlas culpables de entrada ilegal en el país.
Nada más conocer el fallo, el Departamento de Estado de EEUU dijo estar “profundamente preocupado” y aseguró que intentará por todos los medios conseguir su liberación, según un comunicado del portavoz Ian Kelly.
El juicio se ha desarrollado desde el día 4 en Pyongyang a puerta cerrada, hasta que ayer la agencia oficial norcoreana KCNA anunció que se ha confirmado el “grave delito que cometieron (las periodistas) contra la nación coreana y su cruce ilegal de frontera”.