El comité de empresa de Vectrus, la sociedad gestora de los servicios civiles de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) para las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa, ha lamentado que el Tribunal Supremo esté "dilatando" la resolución de los recursos promovidos contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que declara "ajustado a derecho el expediente de regulación de empleo (ERE) acometido en 2014 sobre la plantilla española de la base.
José Armando Rodríguez (UGT), presidente del comité de empresa de la base, ha manifestado a Europa Press que si bien el Supremo resolvió en "aproximadamente un mes" el recurso promovido ante la sentencia del TSJA relativa a los 66 despidos del ERE acometido en 2013 por Vinnell-Brown & Root Spain (VBR), la empresa que gestionaba entonces los servicios civiles de la base de Morón, hace ya varios meses que sigue pendiente la resolución de los recursos interpuestos contra la sentencia del Alto tribunal andaluz que avalaba los 55 despidos colectivos del ERE de 2014.
A su juicio, estas "dilaciones" no se deben a "cuestiones técnicas", sino a que ante el "incierto panorama político" que atraviesa España, el Supremo "no querrá pronunciarse" sobre este asunto a cuenta de su incidencia en la política exterior de España.
LA BASE DE MORÓN
Recordemos que mediante la última enmienda al convenio de cooperación de 1988 entre España y Estados Unidos en materia de defensa, la base de Morón fue convertida en sede permanente de las fuerzas militares estadounidenses de intervención en África. En paralelo, el contingente estadounidense radicado en la base de Morón pasaba de los aproximadamente 850 infantes de marina y 17 aeronaves que acogía mediante prórrogas anuales, a un despliegue permanente de 2.200 militares, 500 civiles y 21 aeronaves.
Además, la enmienda aumentaba hasta los 800 efectivos y 14 aeronaves el límite adicional para despliegues temporales, de modo que la base sevillana puede acoger hasta 3.000 militares estadounidenses en momentos puntuales.
Este notable incremento de la presencia militar estadounidense llegaba después de que entre 2010 y 2014, Vinnell-Brown & Root Spain (VBR), como anterior concesionaria del contrato de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa para la gestión de los servicios civiles de la base de Morón, acometiese 240 despidos entre los trabajadores españoles del recinto militar, mediante tres ERE, desencadenando el conocido conflicto laboral.
Ya en 2015, la empresa estadounidense Vectrus, que ha sucedido a VBR en este contrato de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa, ha acometido otros diez despidos, por lo que la plantilla española de la base de Morón suma 250 despidos desde finales de 2010.
Dada esta situación, el comité de empresa de la base de Morón reclama que la transformación de la base en sede permanente de las fuerzas militares estadounidenses de intervención en África y la ampliación del contingente americano traigan consigo la readmisión de los trabajadores despedidos y la equiparación de las condiciones de la plantilla con las de los trabajadores de Rota y del resto de bases estadounidenses en Europa, lo que implica su transformación en "personal laboral local".