El Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo ha aprobado este miércoles sancionar con 60.000 euros a la empresa Vías y Construcciones, adjudicataria de las obras de los pisos de Los Pajaritos, por sus "continuos retrasos" a la hora de iniciar los trabajos para la edificación de los dos bloques de pisos sociales que sustituirá a los dos bloques de viviendas municipales que se demolieron en 2014.
El Ayuntamiento, además, ha dado un "ultimátum" a la adjudicataria y entienden que, si la obra no comienza de manera inminente, se entenderá el contrato como rescindido y se iniciará un nuevo expediente para que se encargue otra empresa de los trabajos.
El delegado de Urbanismo, Antonio Muñoz, ha explicado que de los 18 meses iniciales previstos para que se comenzasen y culminasen las obras, la empresa ya ha consumindo tres meses "sin ni siquiera iniciarlas". A partir de ahora el marcador cuenta y, si en un par de meses no han comenzado los trabajos, eso "será motivo para la resolución del contrato".
Además, si hacen el amago de empezar las obras o "el paripé", o las inician pero el ritmo de trabajo no es el adecuado y los técnicos de la Gerencia de Urbanismo estima que no estarán resueltas en el plazo previsto (que no les daría tiempo), también sería un motivo para rescindir el contrato. "Se ha acabado el toma y daca con esta empresa. No hay negociación. O empiezan las obras o se les retira el contrato", señaló Muñoz.
El delegado de Urbanismo, acompañado por por el gerente de Urbanismo, Ignacio Pozuelo, explicó que desde la Gerencia se ha rechazado el plan de obra presentado por la adjudicataria "al no adecuarse al proyecto" y que el director facultativo de obra elegido por la empresa "no cumple con los requisitos de titulación exigidos".
"Empezaron con muy mal pie y mostrando sus cartas ya que desde el inicio pidieron un aumento del presupuesto y una modificación de obra", señaló Muñoz, indicando que "esto es la primera vez que pasa" y que todo esto es "consecuencia de las bajas que se producen en estas licitaciones y luego no salen los números".
De su lado, Pozuelo indicó que se adjudicó el contrato de obras en julio de 2015 y que en septiembre de ese año se debían de haber iniciado. Sin embargo, la empresa "tras perder los tres primeros meses" realizó una amago "con un cerramiento que no cumplía los requisitos" con lo que Urbanismo paralizó el proceso. Una vez que se ha vuelto a poner en marcha, el contador vuelve a correr y desde el Ayuntamiento han marcado un "ultimátum" a la empresa para que inicien las obras, y si en un par de meses no han comenzado se podría rescindir el contrato.