Las obras de reparación de los desperfectos causados por el temporal de viento en la grada de Río del estadio de Balaídos han concluido, de modo que el partido del jueves entre el Celta y el Shakhtar Donetsk de la Liga Europa se podrá disputar en este recinto "con toda la seguridad".
Así lo ha afirmado el alcalde vigués, Abel Caballero, quien ha detallado que los trabajos han consistido en la reposición de las planchas que se desprendieron, unos 20 metros cuadrados, y en el refuerzo de la sujeción en una superficie total de unos 350 metros cuadrados.
Caballero ha valorado la labor de los Bomberos de Vigo y, en contra de lo denunciado por la Marea en cuanto a que lo hicieran "en horas extra", ha señalado que lo que allí realizaron "sí era parte de su trabajo".
El desprendimiento de parte de la cubierta de Río provocó la suspensión del partido Celta-Real Madrid, correspondiente al campeonato de Liga, el pasado día 5.