El Ayuntamiento de Marbella, a través de la Tenencia de Alcaldía de Nueva Andalucía y la Delegación de Sanidad, sigue trabajando en materia de prevención e información a la ciudadanía en relación con el caso de envenenamientos de mascostas en la zona de La Campana, cuya investigación continúa abierta por parte del Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local, en colaboración con el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona). El teniente de alcalde de Nueva Andalucía, Cristóbal Garre, y el concejal del ramo, Carlos Alcalá, han mantenido hoy una reunión con representantes de los distintos cuerpos de Seguridad y de los vecinos de la zona, así como responsables de clínicas veterinarias en los que se han atendido algunos de los casos.
Garre ha explicado que desde el Consistorio “se ha seguido desde el primer momento el protocolo de actuación que exigía esta situación” y ha recordado que se tuvo una reunión inmediata con los propietarios de los primeros perros fallecidos y con otros vecinos al detectarse los primeros casos de envenenamiento. “En el mismo momento en que conocimos los hechos nos pusimos a disposición de la Policía Nacional y del Seprona para prestar nuestra colaboración”, ha indicado el edil, que ha señalado que también de manera instantánea “se colocaron en la zona distintas octavillas informando y alertando a los vecinos de lo sucedido para que extremaran las precauciones”.
“Procedimos además a la limpieza y baldeo de la zona ante la posibilidad de que existiera cualquier resto del producto utilizado y para extremar aún más las medidas de prevención y evitar cualquier riesgo acordamos el precinto de un parque infantil, con el fin de impedir que se diera el más mínimo peligro de salud para los más pequeños”, ha apuntado Garre, que ha agradecido la colaboración de los agentes de la Policía Nacional, Seprona y Policía Local que han participado hoy en la reunión, así como “la asistencia y la comprensión de los vecinos que han estado presentes en el encuentro”.
Por su parte, Alcalá ha explicado que hasta el momento la Policía Nacional tiene constancia de seis denuncias en relación con el envenenamiento de siete perros –cinco de los cuales han fallecido- y que los agentes mantienen abierta la investigación “para intentar esclarecer los hechos y detener a su responsable, que se enfrentaría a varios delitos por maltrato animal”. El concejal de Sanidad ha indicado que desde el Ayuntamiento se ha solicitado a los propietarios de otros tres canes que también se habrían visto afectados que presenten las pertinentes denuncias. El edil ha señalado que, sin embargo, el número de mascotas envenenadas sería mayor dado que en el mes de junio ya se presentó una denuncia en este sentido por el fallecimiento de perros, gatos y pájaros en una zona aledaña, “sobre la que no teníamos ninguna noticia”.
Alcalá ha destacado la cooperación “en todo momento” por parte de los distintos cuerpos de seguridad, “un eficiente trabajo que esperamos que pronto de sus frutos”. El edil ha anunciado además que desde la Delegación de Sanidad se solicitará la colaboración del Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de Andalucía (CAD) para la realización de distintos análisis. Por último, ha pedido “cautela a la hora de emitir informaciones sobre este asunto que no se ajusten a la realidad porque, además de crear alarma social, pueden interferir en la investigación policial” y ha exigido de nuevo al PSOE “ejerza una oposición responsable y deje de intentar sacar rédito político utilizando sin ningún tipo de escrúpulos a las mascotas, a los niños y a la actitud despreciable de un individuo que, al menos nosotros, esperamos que pronto sea descubierto y detenido”.