Es curioso pero nos viene una tradición del siglo XIX que nos hace considerar buen alcalde a aquel que mantiene las calles en buen estado. Si se entrevista a los ciudadanos y se les pregunta, por qué le pareció que un regidor fue bueno o malo, su primera valoración vendría referida al mantenimiento del asfaltado, al número de semáforos y como culmen estarían las fuentes y monumentos de las rotondas.
Siguiendo esa norma debería exigírseles tener conocimientos urbanísticos para presentarse a las elecciones. Además las partidas municipales están hechas a salir para esos fines, todo viene rodado, la burocracia correspondiente, las empresas concesionarias, los empleados, la forma de justificar las partidas y el contento ciudadano. Medio millón de euros están presupuestados para el arreglo de las vías jerezanas este año, bien gastados sean.
Ahora, cuándo el dinero debe salir de otra manera se entiende menos. No sólo por parte de los vecinos, también por parte de la máximas autoridades locales. Ahí tenemos el dedo acusador de Mamen Sánchez clavado en el ojo de la municipalizada empresa de Ayuda a Domicilio. Según nuestra querida regidora se han producido muchas bajas y eso no se puede admitir, porque ha habido que dedicarles más dinero. Con lo que les ha dicho en persona y lo que se ha publicado en prensa creo que les habrá quedado meridianamente claro que el ayuntamiento verá mal que se enfermen ellas, sus familiares o cualquiera que les impida ejercer su jornada laboral. Y ojalá fuera sólo eso, la amenaza parece más explícita, algo así como que o se ajustan a lo pactado o pueden salir del consistorio.
¿Por qué no se quejan por igual de los presupuestos urbanísticos que no se cumplen? Se da por hecho que siempre costarán algo más, se pone la pasta y punto pelota, aquí no ha pasado nada. ¿Pero aquí quiénes importan más las personas o las calles? ¿La principal misión de un ayuntamiento no son los servicios sociales? Ocuparse de la ayuda a domicilio es una de las prioridades junto a la inserción social: la de ancianos, adultos, jóvenes y niños.
En Jerez, como en otros muchos lugares se echan de menos centros para la infancia. Muchos niños de la crisis se quedan solos o mal cuidados debido a los requerimientos de las jornadas de trabajo de sus padres. Qué grandes ciudades aquellas en las que las calles están bien atendidas y los niños no. Para cuándo estará de moda lo social.
