La almadraba de Barbate, que gestiona la empresa Petaca Chico, ha sido este año la más madrugadora en la costa gaditana. Y es que este martes realizaba la primera levantá de atunes del año. Lo ha hecho a las puertas del mes de mayo, cuando dan comienzo las diferentes rutas gastronómicas que en torno a este exquisito producto se celebran en las localidades de Conil, Barbate y Zahara de los Atunes.
Sobre las 17.30 horas llegaron al puerto de la Albufera en Barbate. En total se han capturado 30 atunes rojos, entre ellos uno que arrojó un peso de 343 kilos. El peso medio de las capturas fue de 250 kilos.
Cabe señalar que la jornada se alargó más de la cuenta porque en el copo de la almadraba se habían introducido algunos delfines, lo que retrasó la maniobra de pesca en el mar. Entre darle salida a los delfines, dejar que entrasen los atunes y esperar para que no estuvieran estresados, el día de pesca de la primera levantá del año se alargó hasta las 18.30 horas.
En cuanto a la cuota de capturas, aprobada tras la celebración en noviembre del pasado año de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico, a las almadrabas de Conil, Barbate, Zahara y Tarifa, les corresponden prácticamente unas doscientas toneladas más para este año 2018. Es decir, de las 1.097 toneladas del pasado año se pasa a las 1.292 en este 2018, un aumento que fue considerado "insuficiente" por el sector, tal y como manifestó en su día Marta Crespo, directora gerente de la Organización de Productores Pesqueros de Almadraba (OPPA). Y es que el sector esperaba más cuota de captura tras constatarse la recuperación de la especie y tras años de reducción de la misma como parte precisamente de un plan para la conservación de la misma.
