La clase política de Arcos suele realizar un paralelismo con el municipio de Vejer a la hora de comparar el impacto turístico. La oposición comenta con gran frecuencia que Vejer es el paradigma del éxito turístico y no Arcos. En todo caso, ambas localidades gozan de un envidiable patrimonio monumental; Arcos mucho más, por tamaño e historia. Sin embargo, las características socioeconómicas de ambas poblaciones son bien distintas. Arcos, hipotética cabecera de la Sierra, registra un desempleo elevado a pesar de rebajar las cifras, pero Vejer se viene beneficiando tal vez más del flujo turístico por su situación geográfica, a un paso de las mejores playas de España.
El alcalde de Vejer, José Ortiz (PP), piensa que “Si a Arcos le va bien, a Vejer le va bien, porque la provincia debe ser un todo”, pero cree que a Arcos le faltan “ideas y trabajo”, para añadir que el éxito turístico de Vejer se sustenta en la ilusión y en el esfuerzo de todo un pueblo. Ortiz ha dicho que el Gobierno socialista de Arcos es “flojo de trabajo y de ideas”, expresaba en plena Feria de San Miguel al tiempo de prestar su apoyo al candidato del PP en la ciudad, Domingo González.
El alcalde vejeriego piensa que “Arcos y Vejer deben estar a la misma altura en cuestión de trabajo, ilusión y proyectos”, pero que Arcos debe aprovechar mejor sus recursos.
La réplica del alcalde de Arcos no se ha hecho esperar. Isidoro Gambín ha recordado a su homónimo vejeriego la situación en que se encontró el Ayuntamiento hace tres años, cuando el partido de José Ortiz dejó el gobierno municipal.
Gambín asegura que durante este tiempo se han ejecutado obras de gran importancia sin que ello le haya costado un euro al Ayuntamiento. También ha pedido al alcalde de Vejer que se dedique a gestionar su municipio y le ha dicho irónicamente que es “el más listo”. Igualmente, ha asegurado que Arcos será noticia en breve por la ejecución de varios proyectos privados susceptibles de crear empleo y riqueza en la zona, despertando en este sentido las lógicas expectativas.
