El Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez de Huelva ha iniciado una terapia orientada a la mejora de la calidad de vida de determinadas personas con enfermedad mental grave. Las patologías más sensibles a este tratamiento que acaba de introducirse, denominado terapia electroconvulsiva (TEC), son la depresión extrema y los cuadros psicóticos resistentes a los fármacos y a la psicoterapia. Así, aunque la TEC está indicada en un número muy reducido de pacientes, la eficacia se sitúa entre el 70 y 85 por ciento en estos casos.
La TEC es un procedimiento que se lleva a cabo con anestesia general y consiste en la estimulación repetitiva, por inducción eléctrica, de las neuronas del sistema nervioso central durante unos segundos, de forma controlada y ajustada a cada paciente, para desencadenar una convulsión breve de manera intencional, según informa la Junta en una nota de prensa.
De este modo, esta terapia produce cambios en la neuroquímica cerebral que pueden revertir los síntomas de algunas enfermedades mentales, si bien puede no funcionar en todas las personas.
De acuerdo a la evidencia científica disponible, la TEC está indicada en un número muy reducido de pacientes, si bien la eficacia se sitúa entre el 70 y 85 por ciento en estos casos. En concreto, pueden beneficiarse de la misma las personas con determinados cuadros profundamente resistentes (depresiones graves con inhibición extrema y algunos desórdenes psicóticos) con nula respuesta a la terapia psicofarmacológica, que es el primer tratamiento de elección.
Así, la incorporación de esta terapia en el centro hospitalario se enmarca en la línea de mejora continua que viene realizando en los últimos tiempos para disponer en Huelva cada vez de un mayor número de prestaciones sanitarias y evitar los desplazamientos de pacientes a otras provincias. Para ello, ha sido necesario contar con un nuevo equipo de electroterapia, así como la formación previa de los profesionales sanitarios implicados para la adquisición de las competencias específicas para su aplicación.
Según han indicado, "todo ello supone un gran avance" en la Unidad de Gestión Clínica de Salud Mental de Huelva y "un cambio cualitativo" para las personas que sufren algunas de estas patologías, aumentando los recursos y la variedad de tratamientos disponibles en la provincia para mejorar la calidad de vida de dichas personas y sus familias.
La terapia se administra en el área quirúrgica por un equipo multidisciplinar de facultativos (psiquiatra, anestesista) y de enfermería. En función de cada paciente, se precisan entre 8 y 12 sesiones en total, repartidos en 2-3 por semana, variable en función de la respuesta clínica de cada caso. El paciente se encuentra ingresado en la Unidad de Hospitalización de Salud Mental hasta que se produce una mejoría significativa que permite continuar el tratamiento con sesiones más espaciadas y de manera ambulatoria.
La Unidad de Hospitalización de Salud Mental del Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez atiende a pacientes de toda la provincia con enfermedad mental grave en fase aguda, donde reciben tratamiento y cuidados hasta su mejoría y seguimiento en el resto de dispositivos de salud mental de Huelva.
Está integrada por un equipo multidisciplinar de psiquiatras, psicólogos, enfermeros, auxiliares de enfermería, trabajadora social, monitores ocupacionales, personal administrativo y celador, que atiende unos 700 ingresos anuales de diversas patologías.