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Miércoles 13/11/2024
 
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Jerez

Palos Blancos podrá seguir dando sus clases de baile hasta junio

La comunidad de propietarios de Antares, que pidió al Ayuntamiento la suspensión de las clases desde este mes por problemas de ruido, les dejará acabar el curso

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  • La presión de los usuarios y la asociación ha surtido efecto. -

 Finalmente, la Asociación de Vecinos Palos Blancos podrá seguir impartiendo sus clases de baile de sevillanas y bulerías hasta el próximo mes de junio en su sede del número 13 del edificio Antares. El administrador de fincas ha trasladado este fin de semana a la junta directiva del colectivo que la comunidad de propietarios de Antares permitirá a los vecinos mantener los talleres dos horas a la semana por la tarde desde las 18.00 horas en su sede hasta que termine el curso. Tal y como denunció esta asociación a Viva Jerez,  la pasada semana se veían obligados a suspender toda la programación de baile cuando terminara el mes tras un requerimiento del Ayuntamiento a instancias de los propietarios en el que advertían que el local no reunía los requisitos de insonorización para impartir estas sesiones.

Aunque la comunidad no da marcha atrás en su decisión, sí la flexibilizan, pues su propuesta inicial aprobada en asamblea pasaba por pedir al Ayuntamiento que prohibiera estas clases -que se celebran desde hace 14 años en la asociación de vecinos- a partir del mes de abril. Según denuncia la asociación vecinal, el conflicto se originó a raíz de los problemas de ruidos denunciados por un matrimonio que se ha instalado en los últimos meses en el edificio de arriba, si bien hasta este año nunca habían tenido quejas en este sentido. Esta semana los vecinos han colocado una moqueta para amortiguar el sonido de los tacones de unas clases a las que acuden una treintena de niñas y mayores y que corren a cargo de voluntarios.

Lo que más lamentaban en la asociación era que además de perder las clases, se iban a quedar sin el acto de exhibición final que cada año organizan en el Centro Social de La Granja. Por ello, y como último intento, solicitaron que les dejaran acabar el curso. Al final parece que la presión de estos últimos días de los usuarios, que han colocado carteles denunciando la situación, ha calado entre la comunidad de propietarios, que ha dado su brazo a torcer y les dejará seguir con las clases hasta el mes de junio. La idea para el curso que viene es buscar otro local para continuar con estas actividades. Ahora solo quieren seguir con sus clases y no tenerse que ir con el baile a otra parte. 

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