La delegada de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta en Granada, María José Martín, ha participado en la suelta de un ejemplar juvenil de corzo en el Parque Natural Sierra de Huétor.
Según informa la Junta de Andalucía en nota de prensa, se trata de la novena suelta de ejemplares desde 2011, cuando fue liberado el primero en la zona, y esta es una acción que se enmarcada en el Plan de Gestión y Reintroducción del Corzo en Andalucía, iniciado en 2009.
Esta suelta se ha realizado en el cercado de aclimatación de corzos que la Consejería dispone en las inmediaciones del Cortijo de las Mimbres, en pleno corazón del Parque Natural. Hasta el momento, gracias al Plan de Gestión, se han liberado un total de 24 individuos, de los cuales 16 se han soltado en el Parque Natural Sierra de Huétor, y el resto en el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.
Las poblaciones andaluzas de corzo constituyen la última frontera de la especie en el sur de Europa. El clima mediterráneo, con períodos de sequía estival críticos, ha favorecido la adaptación de la especie y la aparición de las características singulares del corzo andaluz, lo que lo convierte en una especie muy relevante del patrimonio de la biodiversidad.
En su visita, la delegada ha destacado "la importancia de efectuar refuerzos de poblaciones solo con ejemplares autóctonos para evitar la pérdida del ecotipo de corzo andaluz, por lo que este tipo de medidas son básicas para preservar y potenciar sus poblaciones".
Existen manuscritos del siglo XVI al XVIII donde ya se hablaba de la importancia del corzo en la provincia de Granada, citándose en lugares tan distantes como Guadix o la Alhambra de Granada, donde sus poblaciones debían ser muy abundantes.
Actualmente, y fruto de estas reintroducciones, el corzo ha sido localizado en una extensa área del Parque Natural, superior a las 10.000 hectáreas, habiendo salvado barreras como la autovía que discurre por el interior del parque natural, lo que confirma la aclimatación al nuevo hábitat ocupado, así como el progresivo crecimiento de la población.
Con esta nueva reintroducción se pretende aumentar la variabilidad genética de la población ya asentada para evitar futuros problemas de consanguinidad.
Mediante estas sueltas, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible consolida e incrementar el área de distribución del corzo en Andalucía, reforzando las poblaciones que presentan niveles bajos y reintroduciendo la especie en áreas andaluzas idóneas donde se extinguió en tiempos recientes, como es el caso del Parque Natural Sierra de Huétor.
El corzo liberado procede de la Estación de Referencia del Corzo Andaluz, que se encarga de proveer para su reintroducción ejemplares originarios de las Sierras de Cádiz-Málaga, con las garantías genéticas y sanitarias que se requieren.
Los resultados obtenidos a través del seguimiento de la especie son positivos, ya que gracias a las sucesivas sueltas realizadas desde el año 2011, se ha observado cómo algunos de los ejemplares repoblados se han avistado a 30 kilómetros de distancia del lugar de la suelta.
Además, la adaptación y el éxito de cría, desde que se liberaron los primeros individuos, ha sido contrastada, por lo que en breve el Parque Natural Sierra de Huétor podrá contar con una población estable de este cérvido.
BENEFICIOS PARA EL TERRITORIO
Como valor añadido, preservar esta especie puede tener un provecho no sólo conservacionista o paisajística, sino también socioeconómico, desde el punto de vista cinegético. El corzo andaluz ha incrementado su valor como trofeo de caza en los últimos años, al tratarse de un ecotipo singular que además vive en unos ambientes de gran belleza natural.
La nueva catalogación de los trofeos de corzo ha supuesto un revulsivo económico en las zonas donde se encuentra esta especie, puesto que las actuaciones de mejoras de las poblaciones de corzo andaluz también suponen la creación de puestos de trabajo de guardería y de servicios para el manejo de la especie, a través de personal especializado en capturas, transporte o veterinarios, entre otros.
Del éxito de la estabilidad y aumento de la población de corzo en el Parque Natural Sierra de Huétor, dependerá la posibilidad de disponer en los próximos años de un nuevo valor económico del espacio protegido a través del recurso de la caza, pudiéndose ofrecer en ese momento la posibilidad de iniciar una serie de recechos entre la población local de cazadores.