Isco Tejón, de los Castañas, puede salir de prisión por 600.000 euros de fianza

La Audiencia Provincial de Cádiz ha dado a Francisco Tejón, Isco, considerado, junto a su hermano Antonio, el líder del clan de narcotraficantes de los Castañas, la posibilidad de quedar en libertad provisional si paga una fianza de 600.000 euros, han informado a Efe fuentes próximas al caso.

La Audiencia Provincial de Cádiz ha tomado esta decisión en una comparecencia celebrada para decidir si prorroga dos años más la situación de prisión provisional de "Isco", que se entregó a la Policía en octubre de 2018 asfixiado por el cerco policial que seguía sus pasos y los de su entorno familiar, meses después de que fuera detenido su hermano Antonio.

"Isco" está a punto de cumplir los dos años de prisión preventiva que en principio establece la ley como plazo para estar encarcelado antes de que se celebre un juicio.

Por eso se ha celebrado una comparecencia para decidir si, como establece también le ley, su situación de prisión provisional se prorroga dos años más, a la espera de que se celebre el juicio.

La Fiscalía Antidroga solicitó en esa comparecencia la prórroga de la prisión provisional.

Tras escuchar a las partes, la Audiencia Provincial ha resuelto que "Isco" siga en prisión salvo que pague una fianza de 600.000 euros, que, a las 17.00 horas de este martes, no había pagado aún.

Hace menos de un año, "Isco" consiguió la libertad provisional durante apenas unos días, después de pagar a través de una sociedad irlandesa la fianza de 120.000 euros que le impuso el Juzgado de Instrucción Número 2 de La Línea de la Concepción, que elevó hasta los 200.000 euros la fianza para su hermano.

La Fiscalía recurrió esta decisión aduciendo, entre otras cosas, el riesgo de fuga de unos narcos que habían lograron estar huidos unos dos años de la Justicia y a los que se les supone un patrimonio de más de 20 millones de euros.

Tras este recurso, que la Audiencia estimó, Francisco Tejón volvió a prisión.

Antonio Tejón, detenido el 6 de junio de 2018, quedó en libertad el pasado 2 de julio al cumplirse los dos años de prisión provisional.

Pero la libertad le duró tan sólo unos pasos, porque los agentes de la Guardia Civil le esperaban a las puertas de la cárcel de Albolote (Granada) para detenerle por otra investigación en la que estaba acusado de blanqueo de capitales y cohecho.

Tres días después, el juzgado de instrucción número 2 de Algeciras ordenó su puesta en libertad bajo una fianza de 12.000 euros y con la obligación de acudir al juzgado cada quince días.

En una de esas comparecencias, el pasado 14 de septiembre, volvió a ser detenido dentro de la denominada operación Dismantle, en la que la Guardia Civil arrestó a 50 personas vinculadas a una red internacional de tráfico de hachís a la que se incautó cerca de diez toneladas de hachís.

Aquella investigación demostró que en apenas dos meses en la calle, Antonio, el Castaña, estaba de nuevo en la cúspide de un gran entramado del narcotráfico en el Campo de Gibraltar.