El San Pablo le saca los colores al Unicaja en un gran último cuarto

El Hereda San Pablo Burgos ganó por 93-101 al Unicaja gracias a un sensacional último cuarto en el Martín Carpena de Málaga, adonde los burgaleses llegaron tras superar un brote de COVID-19, aunque, con el estadounidense con pasaporte georgiano Thad McFadden y el cubano Jasiel Rivero en figura, ambos con 26 puntos, demostraron que siguen imparables.

Ante el empuje final del equipo castellano, que encadenó encadenó su quinto triunfo -tres en la Liga de Campeones y dos en la Liga Endesa-, los malagueños fueron incapaces de reaccionar y de aprovechar las deficiencias del San Pablo en un partido dominado por los locales hasta el final del tercer cuarto.

Darío Brizuela abrió la lata con un triple y anticipó un cuarto intenso con mucha puntuación para ambos, donde las defensas desaparecieron y el Unicaja dominó desde la línea de 6,75 con seis triples en siete intentos.

Además, el base Alberto Díaz dio alas a los malagueños y en el ecuador del primer tramo puso el marcador 13-11 con tres puntos. El equipo andaluz no bajó su intensidad y logró la máxima renta en el minuto 7 (20-15), en un primer asalto que se saldó con una ‘bombita’ de Francis Alonso (30-24, m.10).

El San Pablo Burgos corrigió sus errores desde la línea de triples por mediación de Thaddeus McFadden y recortó distancias, pero el acierto de los malagueños desde la línea de tres tiró por tierra la defensa burgalesa y obligó al técnico Joan Peñarroya a parar el tiempo cuando el Unicaja consiguió la máxima ventaja del partido (45-37, m.16) con un triple del alero estadounidense Tim Abromaitis.

El equipo dirigido por el griego Fotis Katisikaris se aprovechó de la falta de entrenamiento del Hereda San Pablo, debido al brote de coronavirus en el equipo de Burgos, para sacar a relucir su buen hacer desde los 6,75 metros y Brizuela terminó de condenar a los visitantes con otros tres puntos (57-45, descanso).

El paso por los vestuarios fue la medicina apropiada para que el quinteto blanco retomara el ritmo del primer cuarto, pues el San Pablo Burgos anuló al Unicaja durante los tres primeros minutos del tercer asalto con dos tiros libres de Jasiel Rivero y un triple de Vítor Benite que ajustó el resultado a 57-52 y volvió a poner la emoción sobre la pista del Carpena.

McFadden retó a los locales desde los 6,75 y, tras siete minutos extraordinarios, el San Pablo Burgos puso las tablas por mediación de un recuperado Dejan Kravic (65-65, m.27).

Al Unicaja se le atragantó mucho el juego de los de Peñarroya y se aferró a sus dos baluartes: Alberto Díaz y los triples. Así, consiguió llegar al último cuarto con una ventaja de 6 puntos (76-70, m.30) gracias a un '3+1' de Abromaitis.

Con un parcial de 0-10 comenzaron los castellanos un último tramo que tuvo nombre propio: Thaddeus McFadden. El San Pablo Burgos le dio la vuelta al partido en apenas tres minutos (76-80, m.34), lo que obligó a Katsikaris a parar el tiempo.

El duelo Fernández-McFadden en la disputa por la corona de triplista se asentó en la cancha, el Unicaja se agarró como pudo al partido, pero el estadounidense ofreció todo un espectáculo y llevó el partido a los 90 puntos (84-90, m.38).

Aunque el técnico local quiso remendar los errores, la reacción del Hereda San Pablo fue tan acertada que amplió aún la diferencia para acabar con 93-101 en un magnifico último cuarto.

- Ficha técnica:
93 - Unicaja (30+27+19+17): Thompson (5), Fernández (11), Brizuela (18), Thomas (-), Bouteille (3) -cinco inicial-, Díaz (14), Alonso (7), Waczynski (9), Abromaitis (12), Guerrero (4), Nzosa (6) y Mekel (4).
101 - Hereda San Pablo Burgos (24+21+25+31): Salash (7), McFadden (26), Rivero (26), Rabaseda (2), Renfroe (10) -cinco inicial-, Queeley (-), Kravic (3), Benite (11), Barrera (-), Sakho (16) y Horton (-).
Árbitros: Peruga, Martínez y Sánchez.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 28 de la Liga Endesa, disputado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena de Málaga a puerta cerrada.