El vecino de Alcalá la Real detenido este miércoles en Portugal como presunto autor de un delito de sustracción de menores después de que su pareja denunciara que se había llevado a sus tres hijos pretendía salir de la Península, de ahí la importancia del operativo "serio y ágil" que dio lugar a su arresto y en el que, incluso, llegó a saltarse un control "sin ningún tipo de prevención", por lo que se decidió mantener un seguimiento más lejano que no pusiera "en riesgo" a los pequeños.
Así lo han puesto de relieve este jueves el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, y el jefe de la Comandancia jiennense, el teniente coronel Luis Ortega, a preguntas de los periodistas sobre este caso, que se inició una vez que la madre denunció el pasado día 20 haber sufrido malos tratos y que el hombre se había marchado con los menores sin su consentimiento.
El delegado ha valorado "las investigaciones ágiles y eficaces de la Guardia Civil como consecuencia, además, de una orden de detención internacional" que permitió el arresto del padre y la localización de los niños "en buen estado de salud".
"Estamos a la espera de que desde el juzgado correspondiente se decida el destino de los menores. Lo que deseamos es que vengan cuanto antes a España. Hoy seguramente podamos tener noticias de si pasan a la familia o a la comunidad autónoma, que es la competente en materia de menores", ha comentado.
Con respecto a la entrega del detenido a las autoridades españolas, ha explicado que "lo que se haría sería una comisión rogatoria para poder intervenir durante el procedimiento", si bien en este caso no ha entrado en posibles plazos "porque corresponde más a la decisión del juez correspondiente".
El delegado ha hecho hincapié en que la operación se ha desarrollado "de manera muy seria, rigurosa, ágil y eficaz", algo especialmente relevante puesto que lo que baraja la investigación es que pretendía "llevárselos fuera de la Península". "Prácticamente tenemos confirmado que las intenciones fuesen llevárselo fuera de la Península, por eso es muy importante la agilidad porque lo que se ha logrado evitar es que nos hubiera complicado mucho la situación si hubiera logrado su objetivo", ha añadido.
El operativo
En la misma línea se ha pronunciado el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Jaén, quien ha explicado que, una vez recibida la denuncia de la mujer se activó un dispositivo de búsqueda sobre el hombre, vigilando sitios que normalmente transita y habita, además de poner en marcha medidas en todo el territorio nacional "técnicas para ver sus movimientos y seguimientos también con equipos de seguridad ciudadana y de policía judicial".
"Sospechamos que podía salir del país, de modo que ampliamos la búsqueda a nuestros puertos y aeropuertos, principalmente la zona sur. Comprobamos que los vehículos que podía usar no salieron, en este caso en Marruecos, que era en principio nuestra preocupación", ha señalado.
Junto a ello y ante las sospechas de que podía ir a Portugal, se volcaron los esfuerzos hacia allí hasta que se pudo ver la zona en la que estaba. Se solicitó la colaboración de policía portuguesa a través del centro de colaboración ubicado en Ayamonte, desde el que se ha focalizado la búsqueda en el área marcada hasta que pudieron dar con él y los menores.
Ortega ha aludido, además, al "miedo" ante la actitud del ahora detenido, puesto que "en uno de los controles de noche se lo saltó sin ningún tipo de precaución, a una velocidad totalmente excesiva, saltándose línea continua, stop y todas las señales que había". "Decidimos no poner más controles por el riesgo y el peligro que conllevaba tener a los tres niños dentro del vehículo. Preferimos hacer un seguimiento mucho más lejano utilizando medios técnicos, hasta que hemos dado con él", ha destacado.