La Fiscalía de Almería solicita tres años de prisión para un empresario de la capital acusado de tener empleadas a 17 mujeres en "funciones de alterne" en un bar de copas sin haberles dado de alta en la Seguridad Social.
El Ministerio Público resalta que, de las 18 personas que se encontraban trabajando en el local el momento en el que se llevó a cabo la inspección, "solo una de ellas, que ejercía como camarera", tenía documentación laboral en regla.
Considera al acusado autor de un presunto delito contra los derechos de los trabajadores y, al margen de la pena privativa de libertad, interesa el pago de multa de doce meses con una cuota al día de 12 euros e inhabilitación especial por periodo de tres años para empleo relacionado con la administración de industria o comercio, tiempo por que pide se clausure la actividad del local.
Según recoge la Fiscalía en su escrito de calificación provisional, consultado por Europa Press, en la noche del 27 de marzo, agentes de la Policía Nacional adscritos a la Ucrif realizaron una visita junto a la Inspección de Trabajo al centro de trabajo de una empresa administrada por el acusado con sede en un polígono industrial de la capital.
Sostiene que, en la inspección, constataron que 17 de las 18 mujeres que se encontraban en el local de copas "en funciones de alterne" no habían sido dadas de alta en la Seguridad Social por el acusado con carácter previo, "obligación de la que era perfecto conocedor", según remarca.
La vista oral se ha señalado para el 11 de enero ante el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería.