La Guardia Civil ha detenido a un hombre acusado de almacenar y preparar para la venta más de 1.100 objetos y prendas textiles falsificadas en un almacén de Roquetas de Mar (Almería).
En concreto, en la intervención se han incautado de más de 500 pares de calzado, más de 300 gafas de sol y más de 200 relojes, además de sudaderas, polos, bolsos, camisetas y gorras, todos ellos falsificados con etiquetas y serigrafías de primeras marcas, según ha indicado la Comandancia en una nota.
La operación Sericum, llevada a cabo por la Guardia Civil de Almería, es resultado del análisis de riesgos y la obtención de información para prevenir delitos contra la propiedad industrial en el municipio de Roquetas de Mar. La actuación ha concluido con la detención de una persona como presunta autora de uno de estos delitos.
La Guardia Civil realizó vigilancias discretas en un almacén situado en la zona conocida como 'La Urba' de Roquetas de Mar, donde se almacenaban objetos y prendas textiles destinadas a la venta ambulante.
Durante las investigaciones, se observó que un hombre, vecino del municipio, accedía diariamente al almacén, recogía varias bolsas y se desplazaba al paseo marítimo para comercializar los productos mediante el denominado 'top manta'.
A finales del pasado mes de octubre, y tras recabar esta información, se organizó un dispositivo de vigilancia. En el momento en que el autor abrió la puerta para la recogida diaria del material, la fuerza actuante realizó la entrada y el registro del lugar.
Las diligencias instruidas, junto el detenido y las prendas intervenidas, se han puesto a disposición del Decanato de los Juzgados de Roquetas de Mar (Almería).
Según ha indicado el instituto armado, diferentes asociaciones de consumo alertan de que la compra de textiles, bolsos y calzado falsificado, "ya que la composición de los tejidos puede estar mal especificada en el etiquetado puede implicar riesgo para la salud, entre otros, de alergias".
Al igual que ocurre con los tintes, "al estar en contacto con la piel pueden entrar en el torrente sanguíneo y producir de esta manera igualmente alergias, además de riesgo que conlleva a los menores de edad las piezas pequeñas rígidas, como botones que al desprenderse puede existir un riesgo de ahogamiento".
En el caso de las gafas de sol falsificadas, "se pueden dar síntomas de ojos llorosos, enrojecimiento e hipersensibilidad a la luz, sequedad ocular, mareos conjuntivitis y a largo plazo hasta lesiones irreversibles".
Además, en el caso de los juguetes muy recurridos en estas fechas navideñas, "debido a su deficiente acabado pueden tener zonas cortantes, piezas que se desprendan ocasionando riesgo de ahogamiento, intoxicación debido al material y tinte de fabricación o en el caso de que contengan baterías puede existir riesgo de explosión o incendio", han destacado desde la Comandancia.