Los parados tratan de reventar los actos del Día del Trabajador

Ni las cifras del paro, ni la crisis económica, ni la última víctima de la siniestralidad laboral hace apenas un par de días, ni la paralización de los planes de reindustrialización de la provincia, nada pudo ayer en Cádiz contra el buen tiempo y las motos de Jerez. La manifestación del Día del Trabajador reunió a alrededor de 3.000 personas, según la estimación de los sindicatos convocantes, CCOO y UGT. La cifra fue considerablemente menor que la de años anteriores. Concretamente, unas 6.000 personas participaron en la marcha celebrada en la capital gaditana el pasado año.
Al frente de la misma, y sujetando una pancarta con el lema de este año: “Por el empleo con derechos y la garantía de nuestras pensiones”, se situaban los secretarios provinciales de los dos sindicatos mayoritarios, Manuel Ruiz Brenes y Pedro Custodio González. Junto a ellos, numerosos miembros de ambos grupos procedentes de toda la provincia.
Hubo más rostros conocidos entre los manifestantes, la mayoría de ellos del mundo de la política. En este sentido, el grupo más numeroso lo conformaron los miembros de Izquierda Unida, con su secretario general, Cayo Lara, a la cabeza, y toda la cúpula provincial, desde el secretario provincial, Manuel Cárdenas, al parlamentario andaluz Ignacio García o el concejal de IU en el Ayuntamiento de Cádiz, Sebastián Terrada. También estuvieron presentes los miembros del Partido Andalucista y algunos representantes socialistas, como Ana Mosquera, María Colón o el secretario local del PSOE de Cádiz, Federico Pérez Peralta.
Entre el resto de manifestantes, representantes de los diversos sectores productivos. Hubo pancartas para reclamar un nuevo convenio para la hostelería, para reclamar que la edad de jubilación en la construcción atienda a las características de este sector, otras pedían mejoras en la educación o en la industria. También hubo recuerdos para conflictos laborales concretos, como el de los despedidos de El Corte Inglés.
A medida que avanzaba la manifestación, que partió de la plaza Asdrúbal y acabó en la de San Juan de Dios, aparecían los grupos más ruidosos, prácticamente los únicos que alzaron la voz. Izquierda Anticapitalista fue el grupo más reivindicativo, con cánticos especialmente compuestos para la ocasión y con alusiones a la huelga general o a la necesidad de lucha en contraposición con la paz social.
No fueron los únicos que hicieron ruido. Cerrando la manifestación estaban los miembros de la plataforma de parados de ‘Cádiz Capital 2010’, quienes a la postre se convertirían en los protagonistas de la jornada con su intento de boicotear los discursos de los secretarios provinciales de CCOO y UGT. Portando carteles y megáfonos, se acompañaron de una batukada que fue una de las cosas que más llamó la atención a las pocas personas que, ya cercano el medio día, circulaban por la avenida principal de Cádiz. La mayor parte de ellos vestidos para la celebración de comuniones y ajenos a las reivindicaciones que hicieron ayer los sindicatos mayoritarios gaditanos.

Discursos
Ya en la plaza de San Juan de Dios, los dirigentes sindicales se subieron al estrado dispuesto para la ocasión para dirigirse a los compañeros que habían participado en la manifestación y a las personas que llegaban a la plaza en ese momento por casualidad. Algunos despistados preguntaban “¿Por qué es la huelga?”, e incluso algunos turistas no podían resistirse a tomar fotografías de tan colorido acto.
Ante el micrófono, y no sin tener que hacer un esfuerzo para que los gritos de los parados no tapasen su voz, Pedro Custodio, secretario provincial de UGT, fue el primero en hablar. Tuvo palabras para los parados, pero no sólo para lo que ayer estaban concentrados en San Juan de Dios, sino para los 181.800 que la EPA ha contabilizado en la provincia. Pidió un empleo para todos ellos, pero también pidió una garantía para las pensiones de los trabajadores en activo. Hizo hincapié en la importancia de salvaguardar los valores de la democracia frente a los que “nos quieren recortar derechos”.
En la misma línea se pronunció el secretario de CCOO en Cádiz, Manuel Ruiz, que recordó a los nuevos consejeros de Empleo e Innovación de la Junta que “40 días después de haber llegado al Gobierno aún no se han dignado a venir a Cádiz para buscar soluciones”.
Ambos dirigentes coincidieron en reclamar respeto y apoyo para las familias de los desaparecidos durante la dictadura franquista y pidieron la solución para conflictos laborales de la provincia como los de Torraspapel, Airbus, Astilleros o el de algunos funcionarios municipales.