Serbia y Francia se repartieron ayer los puntos (1-1), tras la primera jornada de la final de la Copa Davis, que se juega en Belgrado hasta el domingo, y deja todo en el aire ante el segundo día de competición.

La selección serbia logró empatar con la victoria de Novak Djokovic frente a Gilles Simon, por 6-3, 6-1 y 7-5, en un duelo marcado por el dominio total del principal tenista serbio y número 3 del mundo.

Ya en el inicio, Djokovic logró encontrar la táctica contra el paciente Simon, ex “top-ten” y actual 42 en el ránking de ATP, e impuso un juego intenso que controló hasta el final, con una ligera caída en el tercer set.

El líder del equipo serbio ha sido invencible hasta ahora en el Arena de la capital serbia, pabellón donde se disputa la competición.

“Es la final de la Copa Davis, y el resultado logrado hasta este momento no significa mucho. No importa con quién se juega, porque cada punto, cada partido en estos tres días se debe jugar con la máxima concentración si se desea la victoria”, declaró Djokovic después del duelo con Simon.

Djokovic se enfrentará el domingo a Gael Monfils, número uno francés, quien llevó ayer el primer punto para la selección gala al derrotar a Janko Tipsarevic en el primer partido de individuales.

Monfils puso con contundencia a su rival serbio por 6-1, 7-6 y 6-0, en un duelo que duró 2:05 horas y en que el francés no tuvo problemas para imponerse, excepto en el segundo set.

Tipsarevic fue el héroe serbio de las semifinales ante la República Checa, al ganar los puntos decisivos, pero ayer no pudo hacer nada contra el acertado Monfils. El francés, número 12 del mundo, jugó agresivo, rápido y con intensidad, seguro de sí mismo, y con una tranquilidad que logró mantener hasta el final.

Tipsarevic, el 49 en el ránking mundial, al contrario, entró nervioso en el partido bajo la gran presión de actuar ante su público, aunque en el segundo set mostró un buen tenis y mantuvo incierto el resultado hasta el último momento.

Hoy se enfrentarán en dobles Nenad Zimonjic y Viktor Troicki a los franceses Michael Llodra y Arnaud Clement.
Zimonjic, el mejor jugador serbio en dobles y uno de los mejores del mundo, consideró a sus rivales como un combinado muy fuerte y experimentado, aunque aseguró que la ventaja de la pareja serbia es que es poco conocido el juego el Troicki en dobles.

El domingo, el último día de la competición, tendrán lugar los cruces individuales entre Djokovic y Monfils, y entre Tipsarevic y Simon.

Los partidos se juegan en pista rápida, que conviene a los dos equipos.
La final se disputa en el pabellón Arena, el mayor de los Balcanes, de una capacidad de más de 20.000 plazas, pero de las que para esta ocasión están disponibles 16.200, y los billetes puestos a la venta se agotaron hace días.

Unos 1.500 hinchas franceses han llegado para apoyar a su equipo.
En las gradas esta Jo-Wilfred Tsonga, uno de los mejores jugadores franceses, ausente de esa competición por una lesión.