Este acto representa la culminación de la formación y adiestramiento, tanto en tierra como a bordo, de los 72 hombres y mujeres que conforman su dotación, al igual que el fin de los trabajos llevados por Navantia, en este primer buque. Los otros tres ya están en un avanzado estado de construcción y las próximas entregas no se harán esperar demasiado.
Durante el acto de entrega y abanderamiento del patrullero, el representante del Ministerio de Defensa de la República Bolivariana de Venezuela, Diego Alfredo Molero Bellavia, ha incidido en la unión de Venezuela y España, a través de la entrega del primero de una serie de cuatro buques cuya principal “función será la defensa integral del pueblo bolivariano en nuestra zona económica exclusiva”
“Esta entrega va más allá del acto en sí”, ha subrayado Molero Bellavia, “porque es el resultado de una esfuerzo conjunto entre dos pueblos hermanos, España y Venezuela”.
Además, ha querido dejar claro que este barco no se utilizará, “bajo ningún concepto, como instrumento de denominación o de opresión de otros pueblos hermanos pues los hombres y las mujeres que componen su dotación no tienen otro ideario que el de la libertad”.
Entre sus principales funciones, según ha explicado Molero Ballavia, se encuentran la protección del tráfico marítimo, operaciones de salvamento y la supresión del contrabando y la inmigración ilegal.
Por su parte, el director de construcciones de Navantia, Ángel Recamán, ha afirmado que “éste es el acto más importante del año que se celebrará en los astilleros de Puerto Real, un nuevo hito para los programas en curso destinados a la armada venezolana".
Los Povzee tienen una eslora de 98,9 metros; una manga máxima de 13,6; un puntal a cubierta principal de 7,2 metros; un calado de diseño de 3,8 metros; un desplazamiento de 2.200 toneladas y una velocidad máxima de 25 nudos.
Entre las misiones que pueden desempeñar estos buques están las de vigilancia y protección de la Zona Económica Exclusiva, protección del tráfico marítimo, defensa de intereses estratégicos, operaciones de búsqueda y salvamento, auxilio a otras unidades y humanitarias.
Asimismo, están preparados para realizar labores de control de contaminación marina, persecución del contrabando, tráfico de drogas e inmigración ilegal, vigilancia y obtención de información de inteligencia operativa o medioambiental.
Navantia oferta a la Armada de Brasil once barcos
La compañía pública de construcción naval Navantia ha presentado una oferta a Brasil para participar en la licitación de construcción y venta de cinco fragatas, cinco barcos patrulleros oceánicos y un buque logístico, en el marco del salón de Defensa y Seguridad de Brasil LAAD 2011.
La propuesta española fue presentada por el consejero delegado de Navantia, Luis Cacho,con el apoyo del secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez.
“Es el paso inicial. Ahora necesitamos mantener un diálogo muy intenso y activo”, dijo el responsable de Navantia en la conferencia de prensa celebrada tras la presentación de la propuesta económica.
Cacho explicó que la oferta contempla la construcción local de todos los barcos, exceptuando la primera fragata de la serie, que sería fabricada en un astillero español.
Como parte de la propuesta, Navantia presentó un “amplio paquete” de transferencia de tecnología, que permitiría la gestión de la misma por parte de la Marina brasileña.
Las fragatas están equipadas con el sistema de combate Aegis, desarrollado por Estados Unidos, que podría entrar en el acuerdo de transferencia tecnológica con el visto bueno de Washington.
Méndez explicó que con el “aval” del Gobierno español, Estados Unidos ha aceptado ceder esta tecnología a otros países que han adquirido buques de Navantia y citó el ejemplo reciente de la venta de unas fragatas a Australia.
“España avalará la transferencia de tecnología. Estados Unidos y Brasil son aliados fiables, así que debería de producirse”, consideró el secretario de Estado.
Una de las ventajas de la propuesta de Navantia es la “flexibilidad en el diseño” de los barcos españoles, lo que permitirá adaptarlos a las necesidades operacionales de la Marina brasileña, según puso de manifiesto Cacho.
La propuesta de Navantia también prevé la participación de la industria naval brasileña en el desarrollo del proyecto, lo que es un prerrequisito de la licitación.
El responsable de Navantia aseguró que la Marina brasileña emitirá una resolución previsiblemente a mediados de 2012, en la que definirá cuál es su propuesta preferida.