El monopolio europeo al frente del FMI está en peligro tras la dimisión de Dominique Strauss-Kahn como jefe del organismo.
El monopolio europeo al frente del FMI está en peligro tras la dimisión de Dominique Strauss-Kahn como jefe del organismo, que llevó este jueves a los países emergentes a redoblar la presión para cambiar el proceso de selección de un nuevo líder.
La dirección del Fondo Monetario Internacional (FMI) ha recaído tradicionalmente sobre un europeo en virtud de un pacto de caballeros forjado tras el final de la II Guerra Mundial que garantiza la presidencia del Banco Mundial a un estadounidense.
Pero ese sistema peligra pese a que la Unión Europea (UE) defendió este jueves en bloque la continuidad de un candidato del Viejo Continente en el máximo puesto de la institución.
El nombramiento de un europeo al frente del FMI sería la elección "natural" ya que la UE es el principal contribuyente del Fondo, dijo este jueves la portavoz jefa de la Comisión Europea, Pia Ahrenkilde.
La canciller alemana, Angela Merkel, respaldó la propuesta desde Berlín: "Defiendo la opinión de que debemos de proponer un candidato europeo", afirmó.
Y la ministra de Finanzas francesa, Christine Lagarde, que encabeza la lista de favoritos europeos para sustituir a Strauss-Kahn, se mostró a favor de que haya una propuesta unánime europea para sustituir al ex alto funcionario galo de 62 años.
Distintas se ven las cosas desde los países emergentes que exigen que la estructura de poder en el FMI y su institución hermana el Banco Mundial refleje mejor el nuevo equilibrio de fuerzas en la economía global.
"La composición de la cúpula de poder debería de reflejar mejor los cambios en la estructura de la economía global y representar mejor a los mercados emergentes", afirmó este jueves en un comunicado el gobernador del banco central chino Zhou Xiaochuan.
En la misma línea el ministro de Finanzas filipino, César Purisima, dijo que el hecho de que Asia sea el motor de crecimiento de la economía global implica que Asia debería de asumir las riendas del FMI.
"No ha habido un momento más oportuno que este para que un líder asiático asuma el liderazgo de tan distinguida organización", dijo.
Desde Latinoamérica, llegan peticiones similares. El gobernador del banco central de Chile, José de Gregorio, dijo ayer en una entrevista con el diario británico Financial Times, que el proceso de selección debería de ser "abierto, transparente y basado en méritos".
Criticó, además, el argumento de que la crisis de deuda soberana en varios países de la zona euro haga necesaria la elección de otro europeo: "No escuchamos argumentos similares a favor de un candidato latinoamericano durante la crisis de deuda de los 80 o de un candidato asiático durante la crisis de Asia", dijo.
Desde Washington, el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, instó este jueves a una sucesión "rápida" en el FMI y abogó por un proceso "abierto", lo que podría implicar que EEUU tenga que renunciar a su privilegio de elegir al titular del Banco Mundial.
En ese sentido, el actual presidente del BM, Robert Zoellick, dijo este jueves ante preguntas de la prensa estar "convencido" de que la elección de un nuevo líder para el FMI se hará siguiendo un proceso transparente y competitivo.
Colin Bradford, asesor en temas de desarrollo durante la presidencia de Bill Clinton y analista ahora en Brookings Institution, abogó también en declaraciones a Efe por un proceso realmente competitivo.
"El hecho de que los europeos quieran mantener el control del FMI reduce la legitimidad del director gerente y de la propia institución", afirmó Bradford, para quien el Fondo Monetario es la institución internacional más importante a nivel global en estos momentos.
"Sin lugar a dudas lo es, más que la Organización Mundial de Comercio, que la ONU y que el Banco Mundial", apuntó el experto, quien instó a los europeos a considerar el daño que harían a la institución si se aferran a un privilegio basado en un pacto informal.
El consejo ejecutivo del FMI, que representa a los 187 países miembros de la institución, será el encargado de elegir al sustituto de Strauss-Kahn, que fue detenido el sábado en Nueva York por el presunto intento de violación de una camarera de hotel.