Un 40 % de los consumidores abandona el proceso de compra online por problemas en el proceso de pago, en el que priman la seguridad por encima de la facilidad, y un 65 % de los clientes sigue pagando en efectivo en los comercios físicos.
Según el primer barómetro de medios de pago elaborado por AECOC Shopperview, en colaboración con Bizum, Google, PayPal y Stripe, un 60 % de los consumidores prefiere ser atendidos por un dependiente en el punto de venta a la hora de pagar.
Aunque al 40 % les molesta tener que esperar para abonar su compra, un porcentaje algo mayor (44 %) no utiliza las cajas de autopago de las tiendas aunque estén libres.
No obstante, en el caso de la Generación Z (jóvenes de entre 16 y 27 años), el pago automatizado y ágil, sin tener que ser atendidos por un dependiente, es más valorado, de modo que más de la mitad de los consumidores de este grupo pide distintos puntos en la tienda donde poder pagar y no solo en la salida de cajas.
El uso del teléfono móvil para pagar se va extendiendo y ya es usado por un 26 % de los clientes (un 84 % más sobre 2019).
Aunque la tasa de pago en efectivo es todavía alta en las tiendas físicas (65 %), la mitad de los encuestados dice que ha reducido su uso.
La tarjeta de débito es utilizada de forma habitual por el 60 % de los consumidores y el uso de la tarjeta de crédito sube a medida que avanza la edad de la población.
A la hora de realizar los pagos online, el estudio identifica que dos de cada tres consumidores utiliza la tarjeta, introduciendo los datos cada vez que compra en la misma página web, y en segundo lugar, el pago con PayPal es utilizado por un 40 % de los compradores.
Los jóvenes de la Generación Z son los que más utilizan métodos de pago alternativos como Bizum, Google Pay o Apple Pay.
Un 90 % de los clientes indica que la seguridad es el aspecto más relevante en las compras por internet, mientras que un 60 % prioriza la facilidad de uso.
Un 58 % de los consumidores reconoce que le da miedo compartir sus datos personales y bancarios cuando compra por internet, especialmente entre los mayores de 60 años.
