El Ayuntamiento de Almonte ha presentado este lunes en la Diputación de Huelva la segunda edición del Belén Viviente de El Rocío, un evento que se consolida como uno de los grandes atractivos de la Navidad en la aldea. Tras el éxito del año pasado, en esta ocasión, crece con importantes novedades.
La concejala de El Rocío, Ana Saavedra, ha destacado “la implicación de nuestros vecinos en este proyecto, que no solo pone en valor nuestras tradiciones, sino que también refuerza la cohesión social y el orgullo de esta iniciativa”. Junto a Saavedra ha estado una representación de la asociación vecinal del Belén Viviente, que se ha creado, trabajando estrechamente con el Ayuntamiento. Con ellas ha estado el diputado Manuel Cayuela.
Entre las principales
novedades anunciadas, destaca la
ampliación del espacio del Belén a 3.600 m², lo que permitirá
incorporar nuevas escenas y oficios, como apicultores, escultores y perfumistas, además de reforzar la comodidad para los visitantes. Asimismo, se han introducido mejoras significativas en materia de
accesibilidad, como entradas específicas y zonas adaptadas para personas con movilidad reducida, garantizando que nadie quede excluido de esta experiencia única.
El Belén Viviente, que nos transporta al pueblo de Belén pero en El Rocío, crea un ambiente que fusiona trajes hebreos con elementos de raíces rocieras, presentándose como un ejemplo de innovación que homenajea las tradiciones, atrayendo a los muchos visitantes que estos días acuden a la aldea.
Estará abierto desde este viernes todos los fines de semana, hasta el día 22. Accediéndose por la trasera del Polideportivo Municipal Carmen López, con una entrada simbólica de 2 euros para adultos y 1 euro los niños.