Los partidos de la oposición, que cuentan con mayoría en la Asamblea (Parlamento nacional), sacaron adelante dos iniciativas
La Asamblea Nacional de Corea del Sur aprobó este jueves mociones para inhabilitar al ministro de Justicia surcoreano, Park Sung-jae, y al jefe nacional de policía, Cho Ji-ho, por su papel en la aplicación de la ley marcial decretada por el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, la semana pasada.
Los partidos de la oposición, que cuentan con mayoría en la Asamblea (Parlamento nacional), sacaron adelante hoy dos iniciativas para suspender de sus funciones al ministro y al jefe de policía, que se harán efectivas en cuanto se complementen los trámites necesarios.
Cho, comisario general de la Agencia de Policía Nacional surcoreana, se encuentra además bajo arresto desde la víspera por decisión de las autoridades surcoreanas en conexión con la investigación por la aplicación de la ley marcial.
El jefe de la policía nacional fue arrestado junto al director de la Agencia de Policía Metropolitana de Seúl, Kim Bong-sik, como sospechosos de haber ordenado a oficiales que acordonaran la Asamblea Nacional para impedir la entrada de parlamentarios al edificio en la noche del día 3 al 4, bajo la ley marcial decretada por Yoon.
Pese a ese despliegue policial y al envío de una unidad de las Fuerzas Especiales surcoreanas a la Asamblea para tratar de evitar el acceso de los parlamentarios e incluso para intentar desalojarlos por la fuerza, un número suficiente de diputados participó en una sesión extraordinaria en la que se votó levantar la ley marcial pocas horas después de haber sido declarada.
El presidente surcoreano, por su parte, defendió hoy la implementación de la ley marcial como medida "inevitable" para proteger la "democracia liberal de la dictadura parlamentaria" de la oposición y aseguró que no está "obsesionado" con cumplir íntegramente su mandato y que encara "con confianza" las investigaciones criminales e intentos de destituirlo.
Yoon está siendo investigado por un posible delito de insurrección, y encara además una nueva moción el sábado para destituirlo que tiene muchas posibilidades de prosperar ya que el líder de su propio partido pidió hoy apoyar su inhabilitación, después de que una iniciativa similar fuera bloqueada por la formación gobernante el pasado día 7.