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Jueves 14/11/2024
 
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?Overbooking? de chirigoteros

Para la quinta jornada de Cuartos de Final todos esperaban el aterrizaje forzoso de pasodobles y cuplés de El Yuyu y el Falla se convirtió en la pista idónea para hacerlo.

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  • El ?low cost? se hizo chirigota sobre las tablas. -
  • Chirigota___?El Yuyu? hizo que el público no tomara tierra y sí buenos pasodobles y mejores cuplés
  • Gustó___Las comparsas de Rivero y ElPuerto y ?Los robó? encandilaron con sus letras
Para la quinta jornada de Cuartos de Final todos esperaban el aterrizaje forzoso de pasodobles y cuplés de El Yuyu y el Falla se convirtió en la pista idónea para hacerlo.

Los Que Mueren por la pipa de la Paz... de la Pepi, de la Paqui, de la Pilar
Las lesbianas de Carnaval de Valdés y Guimerá no descartan una mariscada, “muero con una coñeta, con lapas de pelo y un buen ostión, pero soy lesbiana, no mariscón”. Tango a los alcaldes que ha habido, ninguno nacido en Cádiz, “que no han jugado en casapuertas ni han llorado ascensos ni descensos y cuando un hijo se le casa lo celebra en El Puerto, como una rubia que yo me sé”.  Cuplé a Felipe González y su nueva novia, que cuando lo vio desnudo en el cuarto de baño, pensó: “No sé cómo ha gobernado ese capullo 14 años”. Estribillo para hacer la digestión: “No como nada de pan, ni dulce, ni manolete, pero me muero por un molete”. Popurrí sin pelo en pecho: “Mostradores con un blanco suéter, que en vez de pezones, se marcan dos coloretes”. ¡Jiu!

Los Mimosos
La chirigota de Trebujena de estatuas de combois de pejeta plateados toma las tablas, con mimo, eso sí,  “cuando llego de currar me pregunta mi parienta cuánto he conseguío. ¿600 euros, qué has hecho? Ni siquiera me he movío”.

Al fresquito
Siguen en el orden de actuación esta comparsa femenina de Sevilla de ancianas sentadas al fresquito y que cantan un cuplé a sus achaques, “tengo tensión alta, vista cansada y dentadura postiza porque no me queda un diente, si me caso pongo la lista de boda en la farmacia que tengo enfrente”.

Air con el Carair, Carair, Carair, las compañías aéreas que tiene mi Cai
Ni delayed ni cancelled . Aterriza la chirigota de El Yuyu: “Tripuleishon, ready for presenteishon”. Por alegrías arranca el repertorio: “Air con el Carair, Carair, Carair, las compañías aéreas que tiene mi Cai, que ni las turbulencias las vamos a sentir, que mire usted que gracia tenemos aquí”. Pasodoble a lo que ha cambiado su comunidad de vecinos con la inmigración, “si me cruzo en la escalera con un rumano me echa detergente y me limpia las gafas por cojones... lo peor  de todo son las mulatitas que llevan esos tanguitas tan indiscretos, estoy pensando en meterle una denuncia... cualquier día se la meto”. Segundo a que “llega el Vicente... el Bicentenario y yo me pregunto qué hubiese pasado si nos hubiese conquistado Napoleón.. tendríamos a Carla Bruni en vez de a Teófila y en el Louvre gaditano tendríamos a la Mona Lisa Mojonera. El lado negativo es que antes del euro hubiésemos tenido que aguantar 30 años más al franco”. Cuplé a su mujer obsesionada con Rafa Nadal, “Eulalia  se tumba en la pista y yo le enseño el Open de Australia...  ella me tiró un globo con gran oficio y yo le partí el servicio”. Estribillo low cost, “si usted quiere visitar Milán, Nueva York, Estocolmo o Copenague, yo le ofrezco lo mejor y lo mejor es que coja el AVE”.  Popurrí de turbulencias y tormentas, que hace que a una de las azafatas se le quede “más mala cara que a Iniesta con un gotero” y que recuerda que tienen “una caja negra que curiosamente tiene las medidas de mi suegra”.

La Factoría
La comparsa de Rivero, que emplea a Quiñones como representante sindical; a Juan Carlos Aragón,  como psicólogo y a Subiela, que deja en el anonimato  a todos los jefes que tiene por encima, usa como materiales “la plata de la mar para ahogar el miedo que provoca la envidia”. Pasodoble dedicado a quienes se molestan porque el Carnaval vaya a Sevilla, “el Carnaval sólo es de Cádiz, del barrio de La Viña, adonde llegamos tarde si venimos de un contrato... Un pueblo chovinista es un pueblo acabado. Cádiz se hace grande en cada pueblo en el que cantamos”.  Segundo a la mujer con la que se enfadan sus hijos cuando dice que su padre hoy no ha comido, “pero al mirarme al espejo me invade la amargura, pues me veo vestida de negro y recuerdo que soy viuda”. En el popurrí fabrican “libertad, compromiso, iniciativa y valentía”. ¡Ole!

Los robó de cocina
Llegan los robots Cabletaso con cambio de chip y de presentación. Pasodoble al Bicentenario, “que pasará en 2012 cuando ya no quede en el horizonte otro 2012”, Segundo a los poetas de Carnaval que “sólo se miran al ombligo y se olvidan estos artistas que son comparsistas por Paco Alba”. Cuplé al lugar idóneo para llevar a la novia por la noche con el coche, “en Torregorda me cogió el radar por ir follao”. Segundo a lo mismo, pero en La Caleta, “y me multó el Seprona porque la almeja está protegida”. Estribillo con procesador de doble núcleo: “Si tienes algún problema, me formateo. Si se me queman las papas, yo me formateo. Si quieres trabajo en Cádiz, no hay forma, Teo, no hay forma, Teo”.  Popurrí que explica cómo llevar a los niños al colegio, “todos los niños llevan libros y tú parece que llevas escombros”. 

La Tribu del compás 
Los gitanos de El Puerto llegan desde India para inundar el Falla de quejíos, “te traigo mi cultura para cambiarla por tus mares que provocan mi locura”. Pasodoble que explica que “el tres por cuatro no son doce; el domingo es Carranza y el Manteca es papel de estraz... y que se mueran los politiquillos si no entienden el guirigay, que este es mi pueblo, mi gente y mi Cai”. Popurrí para no irse de Cádiz, “sin marcharme te estoy echando de menos”. El público los despide con en pie en correspondencia con su declaración de amor, “si quieres me pongo coloretes y entierro los quejíos”.

Los Taranto Raptors  
La ÑBA se mete en la zona de Cuartos de Final con su tipo de gitanos baloncestistas opara cantar un pasodoble a Aído, “Bibiana, dónde carajo está la igualdad”. Lo que es evidente es la afición por el juego limpio: “El juego de la canasta, chiquilla, me vuelve loco porque la meto poquito a poco”.

El batallón de la orilla
Cierra la sesión la comparsa de Algeciras, y como batallón de arrena que es,  canta -“a las olas que vienen y van”.  Pasodoble a la justicia, “no puede ser que un juez se equivoque y un hijo de puta mate a una niña, El que la hace la paga, tanto un juez como un obrero”.

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