Érase una vez, una oposición animada ante tantos charcos y pancartas, con tanto ímpetu opositor y negativo sobre todo lo que se hacía en El Puerto, con tantas ganas de demostrar ante la prensa las cagadas y desganas del gobierno, con el éxtasis continuo de creerse estar en el “Sálvame Político” de la Sexta los sábados por la noche y no en un pleno que, una vez mezclados entre si, no se acuerdan de “na”.
Rebasados los cien días, los vecinos y hasta los sindicatos han caído en la cuenta, “¿de lo mío qué?”. Tras el verano, la FLAVE se ha puesto manos a la obra reclamando al Ayuntamiento que en los pliegos de condiciones de las contratas se recoja la subrogación de las plantillas.
¡Perdón, quise decir CC.OO!
Para evitar la confusión, mejor recordar que los que eran oposición hace un año y pico, y fijándonos en el pleno ordinario del 16 de enero de 2014, exigieron como punto estrella – TODOS y mencionando a CC.OO – a través de una moción, garantizar en el pliego de condiciones del servicio de ayuda a domicilio la subrogación de todo el personal de la empresa saliente.
Pues otra “pa la buchaca”, cuando estaba en la oposición, el alcalde para la mayoría dijo en el pleno “hay que subrogar diga el convenio lo que diga” o “y el pliego dirá literalmente que sí hay obligación de subrogar los trabajadores”, ahora con la ley en la mano y con los informes técnicos en la otra, redactan el pliego de ayuda a domicilio y la cláusula de subrogación brilla por su ausencia, como ocurrirá con los demás pliegos de las contratas.
Mientras tanto, la concejala de agujeros, baches y pinturas urbanos, que es de CC.OO y ex -máxima representante sindical de las trabajadoras de la limpieza de edificios municipales, no recuerda que en su coronación como miembro de la lista socialista fue presentada como trabajadora de la citada subcontrata municipal, a la vez que el candidato para la mayoría, ahora alcalde de los ellos y las ellas, prometió la subrogación de todos los trabajadores.
¡Ole! ¡viva la amnesia microtemporal, tanto de la edil, que no se sabe cómo lo explicará a sus “compis” y a su jefe-vecinal y secretario local de CC.OO, como del alcalde que con su magnífica forma de comunicar, su verborrea de colegio weno, weno no se acuerda de nada de lo que defendió, prometió, abanderó y ahora dejó en el cajón. ¡ojú, ojú, pare!
