El tiempo en: Costa Occidental

La Taberna de los Sabios

El espejo (siempre) roto de los ideales (siempre) vivos

Perseguimos ideales con nuestros discursos luminosos, pero siempre terminamos rompiendo el espejo que los refleja en la vida real.

Publicado: 29/01/2019 ·
21:24
· Actualizado: 29/01/2019 · 21:24
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Autor

Manuel Pimentel

El autor del blog, Manuel Pimentel, es editor y escritor. Ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales

La Taberna de los Sabios

En tiempos de vértigo, los sabios de la taberna apuran su copa porque saben que pese a todo, merece la pena vivir

VISITAR BLOG

Vivimos a caballo entre el ser y el deber ser. El ser, carnal y real.El deber ser, ideal y utópico. Decimos perseguir nuestros ideales, para, en verdad, descubrir nuestras limitaciones en cuanto nos reflejamos en el espejo de la realidad. Perseguimos ideales con nuestros discursos luminosos, pero siempre terminamos rompiendo el espejo que los refleja en la vida real. Y es que somos lo que hacemos y no lo que decimos querer hacer…

Un votante de Podemos, hoy: “Todo fue hermoso cuando vivimos en el reino de la frase, en el ensueño del ideal. Sí se puede, entonábamos con ilusión y euforia contenida. Y conjugábamos nuestras palabras claves - la casta, los ricos, el pueblo -, como recetas milagrosas para los grandes males que nos afligían, como el paro, la crisis, la desigualdad, los desahucios o la corrupción. Y el sortilegio funcionó y una oleada de votos entusiastas nos impulsó hasta las alturas. Durante un tiempo, llegamos, incluso, a figurar como primera fuerza en intención de voto. Hoy parece un sueño, un imposible, pero así fue. Alcanzamos el poder en muchas instituciones. Descabalgamos entonces del potro del idealismo y nos uncimos al yugo de la realidad, realpolitik que la llaman. Y de la luz pasamos a las penumbras; de lo hermoso, a lo feo; de lo traslúcido a lo contaminado. Y nuestros líderes, antes ángeles, demostraron que nada de lo humano le era ajeno. Enchufes, chalés, egos, peleas, endiosamiento. Desencanto, clamaron las bases, como si despertaran del hermoso sueño de lo pudo haber sido pero que ya nunca será”.

Un votante de VOX, hoy: “Todo es hermoso ahora, cuando vivimos en el reino de la frase, en el ensueño del ideal. Viva España, repetimos con orgullo y euforia contenida. Y conjugamos nuestras palabras claves – España, reconquista, autonomías – como recetas milagrosas para los grandes males que nos afligen, como la ruptura de España, la dictadura de género o la reinvención de la historia. Y el sortilegio funciona y una oleada de votos entusiastas nos ha impulsado hasta las alturas en Andalucía, pronto en el resto de España. Alcanzaremos el poder en muchas instituciones. Y nos mantendremos fieles a nuestros ideales, sin que nos empesebremos ni nos atemos a los bueyes del conformismo. Venimos a transformar, no a dejarnos vencer por la realpolitik. Con nuestra luz, derrotaremos a las penumbras; con nuestros hermosos ideales la fealdad y la maldad ajena;con nuestra transparencia, la contaminación de los corruptos. Porque nuestros líderes son honestos, valientes, trabajadores y siempre antepondrán el bien común al beneficio propio. Y nunca caeremos en los males de los partidos decadentes. Así que nunca habrá ni enchufes, ni chalés, ni egos, ni peleas, ni endiosamiento. Nunca desencantaremos a nuestras bases ni a nuestros votantes”. Y lo dice convencido, entusiasta. Pobre, que la ilusión le dure hasta que su realidad vuelva a romper el maldito espejo en el que siempre tendremos que reflejarnos.

Que así es la rueda de la vida. Precisamos creer, ilusionarnos de nuevo con idealesrenovados. Así fue desde siempre, aunque sepamos, en el fondo de nuestro ser, que el espejo roto finalizará. Y, después, vuelta a empezar, para que la rueda nunca se detenga.Podemos quebró el espejo de su ideal, VOX romperá también el suyo. Es sólo cuestión de tiempo, como lo dictaminan las leyes humanas que ya determinaron los ciclos gastados del resto de los partidos. ¿Cinismo? Sin duda alguna. Pero, ¿quién dijo que bajo la capa de los sabios no se esconde, siempre, un cínico ilusionado?

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN