El Madrid cerró ayer en Atenas una crisis que comenzó hace una semana en Polonia, ante el Prokom, al imponerse por segunda vez en la Euroliga al Panathinaikos (67-76), el campeón de Europa, y recuperar el liderato del Grupo D.

El bajón le ha costado al Madrid dos derrotas inesperadas ante el Prokom y ante el Xacobeo, en Santiago, y el partido de Atenas llegaba en un mal momento.

El equipo blanco realizó uno de los mejores y más completos partidos de la temporada, desde que lo entrena el italiano Messina, y lo hizo cuando más lo necesitaba y en la pista más difícil, el OAK de la capital griega.

En el cuadro español casi todos estuvieron a la altura de las circunstancias, pero fue, sobre todo, Garbajosa el que lo lideró en los peores momentos con 13 puntos y 19 de valoración.

BARCELONA-ZALGIRIS
 
Consolidado como el único equipo invicto de la Euroliga, el Regal Barcelona sumó su octava victoria en Europa frente al colista de su grupo, el Zalgiris Kaunas, un rival que apenas inquietó al conjunto azulgrana, amplio dominador en todas las facetas del juego, en una de sus victorias más cómodas de la competición (89-55).

Apenas ocho minutos tardó el Barça en despegarse en el marcador y comenzar a asegurarse el triunfo.

Fue lo que duró el Zalgiris en el Palau. Resistió a lo largo del primer cuarto y poco a poco fue desapareciendo de la pista, víctima de su inexperiencia, frente a un Barça que no necesitó emplearse a fondo para obtener su victoria más cómoda.

Llegó a dominar por 40 puntos (85-45, min. 37), pero al final firmó el mismo resultado que en su último partido europeo en casa, ante el Fenerbahce.

Fue Ndong el encargado de sostener al Barça en los primeros minutos. El Barça anotó cómo y cuánto quiso. Del Zalgiris de primera línea europea de finales de los noventa apenas queda el nombre. Los lituanos están al borde de la eliminación en la Euroliga.

EFES PILSEN-UNICAJA

El Unicaja se clasificó ayer para la siguiente fase de la Euroliga al vencer al Efes Pilsen en Estambul (Turquía) (77-79) y además rompió un registro desfavorable con el conjunto turco al que no había podido vencer como visitante en ninguno de los tres partidos anteriores.

El Unicaja mostró sus credenciales en una de las canchas más difíciles de Europa y se tomó muy en serio el partido, aunque dentro de dos días se enfrenta en la Liga ACB al Blancos de Rueda Valladolid, donde se juega buena parte de sus opciones de disputar la próxima edición de la Copa del Rey.

A excepción del primer periodo en los siete primeros minutos, donde el Efes Pilsen, que se jugaba el Top-16, fue superior por su intensidad tanto en defensa como en ataque 15-11, el Unicaja cambió radicalmente su posición y actitud y con su presión desarboló a los locales 17-17, minuto 9.1